5 de septiembre de 2010
El coyote es un personaje habitual en cuentos y tradiciones de los indios norteamericanos coyote, donde generalmente aparece como un animal inteligente y vivo. Los coyotes de hoy en día han utilizado su viveza para adaptarse al cambiante paisaje de América del Norte. Hubo un tiempo en que estos cánidos vivían principalmente en praderas abiertas y desiertos, pero en la actualidad vagan por los bosques y montañas del subcontinente. Han llegado a colonizar ciudades como Los Angeles y se les encuentra en prácticamente cualquier rincón de América del Norte. Las poblaciones de coyotes se hallan posiblemente en su momento álgido.
El coyote es un animal con gran capacidad de adaptación y prácticamente omnívoro. Caza conejos, roedores, peces, ranas e incluso venados, y tampoco le hace ascos a los insectos, las frutas, la hierba y la carroña. Muchos rancheros y agricultores le consideran una plaga destructiva, ya que a veces mata corderos, terneros y otras clases de ganado.
El coyote es un cazador formidable cuando actúa en campo abierto, donde puede hacer uso de su aguda vista y de su gran sentido del olfato. Es además capaz de alcanzar corriendo una velocidad de 64 kilómetros por hora. Durante el otoño y el invierno, se reúnen en manadas para cazar con más eficacia.
Los coyotes forman sólidos grupos familiares. Al llegar la primavera, las hembras se retiran a sus guaridas y dan a luz a camadas de entre tres y doce cachorros. Ambos padres se encargan de alimentar y proteger a sus crías y de guardar su territorio. Los cachorros son capaces de cazar por sí mismos al siguiente otoño.
Los coyotes son parecidos a los lobos, aunque de menor tamaño, por lo que en Estados Unidos se les conoce también como lobos de las praderas o lobos de la maleza. Se comunican mediante un aullido característico, que por la noche a menudo se convierte en un estruendoso coro canino.