Hormigas: datos e información básica
Hay cientos de miles de especies de hormigas en el mundo, esto las hace unos insectos muy comunes, pero eso no quita que sean menos especiales y únicas.
Una hormiga cortadora de hojas en el zoo de San Luis (Estado Unidos). Ha cientos de miles de especies de hormigas en el mundo, 47 de ellas solo de hormigas cortadoras de hojas que se pueden encontrar en el hemisferio occidental.
Este artículo se publicó el 5 de septiembre de 2010 y ha sido ampliado el 30 de marzo de 2023.
Las hormigas son insectos comunes, pero presentan algunas características únicas. En el mundo se conocen más de 12 000 especies de hormiga. Predominan especialmente en los bosques tropicales, donde en determinados lugares pueden suponer hasta la mitad de la población de insectos.
¿Qué son las hormigas?
Las hormigas son insectos con algunas capacidades únicas. Destaca sobre todo su legendaria capaciad de comunicación que permite que sus colonias funcionen como superorganismos.
Hay unos 20 000 billones de hormigas en el mundo, o lo que es lo mismo, más o menos 2,5 millones de hormigas por cada humano. Aunsque se conocen más de 12 000 especies de hormiga (de la familia de las Formicidae), algunos expertos creen que podría haber hasta 20 000 hormigas distintas. Eso hace que las podamos encontrar en casi todos los rincones de la Tierra, salvo en Antártica, Islandia, Groenlandia y algunas islas remotas.
(Relacionado: Confirmado: las hormigas producen leche)
Las especies invasoras de hormigas se están convirtiendo en un problema y algunos estudios demuestran que se han encontrado cerca de 500 especies de hormigas en países en los que no son autóctonas, habiendo sido llevadas inconscientemente por humanos o en el comercio de mercancias. Estas hormigas alienígenas pueden cambiar la dinámica de un ecosistema, consumir recursos y matar otros organismos. La suma de estos efectos negativos: desde 1930 hasta 2021, las hormigas invasoras han causado cerca de 47 000 millones de euros en pérdidas.
Dieta y comportamiento
Las hormigas, insectos sociales entusiastas, suelen vivir en comunidades de nidos estructurados que pueden estar situados bajo tierra, en montículos a nivel del suelo o en árboles. Las hormigas carpinteras, que incluyen más de mil especies del género Camponotus, anidan en la madera y pueden ser destructivas para los edificios (muy parecidas a las termitas, que causan daños mucho más graves). Algunas especies, como las hormigas arrieras, desafían la norma y no tienen hogares permanentes.
Una sola colonia de hormigas puede contener cientos de miles de individuos. Las comunidades están encabezadas por una o varias reinas; algunas especies poligínicas pueden tener desde dos hasta miles de reinas. Las reinas ponen miles de huevos para asegurar la supervivencia de la colonia. En algunas especies, los machos (llamados zánganos) sólo desempeñan una función: aparearse con la reina. Suelen morir poco después. Las obreras, los miembros más visibles de la colonia, son hembras que nunca se reproducen, sino que buscan comida, cuidan de las crías de la reina, trabajan en el nido y protegen a la comunidad. Algunas obreras pueden cargar 50 veces su propio peso corporal.
Las hormigas se comunican y cooperan segregando feromonas, o sustancias químicas aromáticas, que pueden alertar a las demás del peligro o conducirlas a una fuente de alimento prometedora. Suelen comer néctar, semillas, hongos o insectos. Sin embargo, algunas especies tienen dietas más inusuales. Las hormigas arrieras, con sus grandes mandíbulas y dolorosos aguijones, pueden alimentarse de reptiles, aves o incluso pequeños mamíferos.
Las colonias de hormigas están tan estrechamente unidas y son tan eficientes que pueden transmitir conocimientos útiles entre generaciones, lo que, según algunos expertos, constituye una "memoria" de la colonia. Este tipo de conocimiento comunal es esencial para la defensa, por lo que las hormigas pueden diferenciar fácilmente las fuerzas amigas de las hostiles.
(Relacionado: Por qué las hormigas invasoras son una amenaza mayor de lo que se pensaba)
Hormigas poco comunes
Entre los muchos miles de especies de hormigas conocidas, hay muchas que desempeñan funciones ecológicas únicas, lo que se traduce en el desarrollo de características físicas especiales y comportamientos interesantes.
Por ejemplo, las hormigas tienen diversas defensas biológicas. Las hormigas de fuego muerden y pican con un veneno llamado solenopsina. También pueden sobrevivir a las inundaciones agrupándose para flotar en la superficie del agua. Otras especies, como la recién descubierta Pheidole drogon, han evolucionado hasta desarrollar púas o espinas en su exoesqueleto.
Una especie amazónica (Allomerus decemarticulatus) construye cooperativamente extensas trampas de fibra vegetal. Cuando un insecto pisa uno de los muchos agujeros de la trampa, cientos de hormigas del interior utilizan las aberturas para apresarlo con sus mandíbulas.
Otra especie, la hormiga loca amarilla (Anoplolepis gracilipes), es capaz de formar las llamadas supercolonias que albergan cientos o incluso miles de reinas. En la isla australiana de Navidad, la introducción accidental de hormigas locas amarillas a principios del siglo XX ha provocado una infestación destructiva. Las hormigas son una amenaza importante para la población endémica de cangrejos rojos de la isla, desplazando a los crustáceos de sus madrigueras o incluso matándolos cuando pasan junto a los nidos de hormigas durante su migración anual del bosque a la costa.
(Relacionado: Cómo ayudan estas hormigas a encontrar fósiles)
¿Sabías qué…?
Las hormigas mantienen una relación simbiótica con un grupo de plantas llamadas mirmecófitas, que les proporcionan alimento y las hormigas las protegen de las plagas.
- ScienceDirect
Hay varias especies de avispas que se parecen mucho a las hormigas, entre ellas la hormiga de terciopelo, que en realidad es una avispa peluda y sin alas.
- Universidad de Nebraska-Lincoln
Hormigas antiguas encontradas perfectamente conservadas en ámbar nos han dado pistas inestimables sobre su evolución. Se cree que un ejemplar de hormiga cazada tiene 99 millones de años.
- Science Focus BBC
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.