Descubre las mejores fotografías microscópicas de 2022
Los ganadores del Concurso de Fotomicrografía de Mundos Pequeños de Nikon nos dejan pequeñas maravillas del mundo natural que normalmente permanecen ocultas a la vista.
Una delicada ráfaga de partículas de humo, compuesta por el carbono no quemado de la cera de la vela, sale hacia arriba desde la mecha de la vela que aún está ardiendo. El fotógrafo Ole Bielfeldt creó la imagen en su estudio, utilizando una velocidad de obturación extremadamente rápida (1/8000) y una fuente de luz LED muy potente.
A lo largo de la historia, los seres humanos nos hemos esforzado por comprender las realidades que existen más allá de nuestra percepción natural. Ya sean los vibrantes mundos sensoriales que experimentan los animales no humanos, la inmensidad del universo observable o el funcionamiento interno del reino microscópico, hay innumerables maravillas que los humanos no podemos ver directamente.
Afortunadamente, la comunidad científica y fotográfica ha dominado el arte de ampliar y capturar lo minúsculo. Y cada año, el Concurso de Fotomicrografía de Mundos Pequeños de Nikon celebra las imágenes que permiten ver estos mundos diminutos. En la 48ª edición del concurso, cuatro jueces han seleccionado unas cuantas de fotografías tras examinar cerca de 1300 propuestas. Te las mostramos a continuación.
(Relacionado: Colección Mundo Oculto: estas fotografías revelan el extraordinario mundo de la vida microscópica)
La fotografía ganadora, anunciada esta semana, es una imagen de los investigadores de la Universidad de Ginebra (Suiza) Grigorii Timin y Michel Milinkovitch que muestra la mano de un embrión de geco diurno gigante de Madagascar. Creada mediante microscopía y cosido de imágenes, el resultado es una vista fluorescente que revela la delicada complejidad de la mano del geco, destacando los nervios, tendones, ligamentos, huesos y células sanguíneas que trabajan sinérgicamente para ayudar a estas criaturas a escalar paredes sin esfuerzo.
Otras imágenes captan un grupo de conductos lácteos humanos de aspecto bramante, una bocanada de humo y el cuerpo fructífero de un moho de baba, un organismo que parece sacado directamente de un cuento de fantasía. Todos los ganadores están disponibles en el sitio web de Nikon, y para este artículo, la editora de fotografía de National Geographic, Samantha Clark, seleccionó 13 imágenes que capturaron su imaginación, demostraron el poder de la microscopía o la inspiraron a pensar más profundamente en el mundo oculto que está fuera de la vista.
(Relacionado: Ganadores de la anterior entrega del concurso anual de fotografía Small World de Nikon)
"Ver cara a cara a los insectos de esta manera es siempre emocionante. Y ahora, cada vez que miro un espárrago, puedo pensar en éste", dice Clark. "La imagen ganadora de la mano embrionaria de la salamanquesa es hipnotizante con todas las capas de piel, huesos y vasos sanguíneos. ¿Y quién iba a decir que el colon humano podía ser tan genial en esta imagen flower-power de criptas epiteliales?"
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.