El anillo de diamante, las perlas de Baily y otros fenómenos visibles durante un eclipse solar
Imponentes fulguraciones y planetas durante el día: estos son solo algunos de los singulares espectáculos celestiales que podrás disfrutar mientras contemplas un eclipse solar total.
Cuando la Luna se interponga entre nosotros y el Sol el próximo 21 de agosto, millones de personas de Estados Unidos tendrán la oportunidad de presenciar un eclipse solar total. Desde la costa de Oregón hasta las playas de Carolina del Sur, los observadores del firmamento se están preparando para experimentar un momento increíble cuando el día se convierta en noche durante unos instantes.
Sin embargo, un eclipse total es mucho más que oscuridad total. En los momentos antes y después de la totalidad, los observadores informados podrán contemplar algunos rasgos celestiales especiales que solo son visibles cuando la Luna eclipse al Sol.
Estos son algunos de los fenómenos que debes buscar si te encuentras en la trayectoria de totalidad.
Noticia relacionada: Las sorprendentes reacciones de los animales a los eclipses solares
El efecto de anillo de diamante
Unos 15 segundos antes de que la Luna cubra por completo al Sol, solo queda un diminuto semicírculo de luz solar y la tenue capa más externa del Sol, o corona, empezará a verse. En este momento, la brillante luz solar se transforma en un impresionante estallido de resplandor concentrado en una región específica en torno al borde del Sol. Junto con la corona, alrededor del disco solar, el estallido de luz crea lo que conocemos como efecto de anillo de diamante.
Las perlas de Baily
En los segundos finales antes y después de la totalidad, una serie de puntos blancos brillantes de luz solar conocidos como perlas de Baily, nombrados en honor al astrónomo Francis Baily, aparecen en torno al borde de la silueta de la Luna. Esta joya de espectáculo se forma por la luz solar que se filtra por los profundos valles y cráteres en el borde del disco lunar. Los observadores pueden esperar que cada una de estas deslumbrantes perlas duren solo una fracción de segundo antes de desaparecer, y a continuación el Sol se oscurecerá por completo.
Te puede interesar: Consejos para fotografiar un eclipse solar
Las fulguraciones solares
A medida que la Luna comience a eclipsar al Sol por completo, las impresionantes fulguraciones, también conocidas como protuberancias solares, se volverán visibles y aparecerán en el borde del disco solar, que se estará oscureciendo. Las protuberancias están sujetas a la superficie del Sol y dan vueltas a millones de kilómetros en el espacio. Los observadores en la Tierra solo podrán verlas durante los momentos cercanos a la totalidad.
Galería relacionada: Eclipse lunar: cuando la Luna enrojece
La corona
Los preciados escasos momentos de totalidad ocurren cuando la Luna cubre por completo al Sol, la única ocasión para la gente en la Tierra para ver la corona sin usar un equipo especial. La parte más externa de la atmósfera solar se extiende a millones de kilómetros por el espacio, pero normalmente no se ve debido al brillo de la superficie de la estrella, más densa.
El 21 de agosto, los observadores en el Parque Estatal Giant City, al sur de Carbondale en Illinois, serán los que podrán disfrutar durante más tiempo de la corona: allí, la totalidad durará dos minutos y 41,6 segundos. En julio de 2009, los observadores en Asia presenciaron un eclipse total excepcionalmente largo cuando la Luna bloqueó la luz del Sol durante casi siete minutos.
Más sobre eclipses: Stan Honda fotografía el eclipse solar de 2015 en Svalbard, Noruega
Planetas y estrellas
Además de poder ver la corona, los observadores podrán ver estrellas y planetas durante el día gracias a que la totalidad oscurece el cielo circundante. El 21 de agosto, Venus y Júpiter serán los que tengan un aspecto más brillante, al situarse aparentemente en polos opuestos del cielo durante el eclipse. Marte y Mercurio estarán mucho más cerca del Sol, por lo que serán más tenues, aunque visibles de todos modos.
También puedes buscar la brillante Sirius o Alfa Canis Maioris en la parte baja del suroeste del cielo, así como la anaranjada Capella a la derecha de Venus y las estrellas gemelas Cástor y Pólux, justo encima del planeta.
Para no perderte más fenómenos astronómicos este mes, sigue leyendo: Dos eclipses, las Perseidas y otros fenómenos astronómicos que no te puedes perder en agosto