Estas son las tripulaciones que se preparan para vivir en Marte
Una fotógrafa nos muestra cómo es el entrenamiento para vivir en el planeta rojo.
Entrenar para ir a Marte requiere una considerable suspensión de la incredulidad. Pero eso no ha impedido que montones de personas participen en simulaciones que recrean Marte en la Tierra para entender mejor y prepararse para el desafío de enviar humanos al planeta rojo algún día.
Los denominados análogos de Marte, ubicados normalmente en ubicaciones arenosas y remotas, suelen contar con opciones de estilo de vida destinadas a aproximar el viaje de la humanidad al planeta más próximo: hay un retraso de 20 minutos en las comunicaciones (así que nada de llamadas telefónicas); las comidas están hechas con alimentos liofilizados o cultivados minuciosamente; hay suministros de agua limitados; y nunca debes abandonar el hábitat sin un traje espacial o, de lo contrario, la atmósfera marciana tóxica acabará contigo.
«Quiero docmentar cómo llegamos a Marte y por qué hicimos todo lo que hicimos, y qué significa la existencia en Marte», afirma la fotógrafa de Boston Cassandra Klos, quien documenta estas simulaciones. «Tienes una misión y necesitas completar dicha misión, no puedes abrir la puerta y salir sin más».
Además de esa ineludible dicotomía de realidad, Klos quería producir el tipo de imágenes que sacaría si fuera la primera fotógrafa humana en Marte.
«¿Qué me interesaría ver en las primeras fotografías de personas en Marte? ¿Humanos en el paisaje? ¿La escala?», se pregunta. «Me encantaría mostrar la dinámica entre la inmensidad del paisaje y la naturaleza claustrofóbica de dónde estuviste para llegar allí».
Para Klos, entender esta parte del viaje significaba que necesitaba experimentar el Marte terrestre en su propia piel.
Por eso visitó las instalaciones de HI-SEAS, en las que diversos participantes han vivido hasta un año dentro de una cúpula geodésica situada en las laderas del Mauna Loa, en Hawái. Este experimento aísla a tripulaciones de seis miembros en un entorno volcánico que no es muy diferente al que podríamos encontrar en Marte (a excepción de la gravedad terrestre y el aire respirable). Está diseñado principalmente para estudiar la psicología y la dinámica de grupo que se producirían durante el aislamiento de un viaje al espacio profundo.
También ha visitado el HERA (Human Exploration Research Analog), que se encuentra en el centro espacial Johnson de la NASA en Texas y que prepara a tripulaciones de cuatro personas para volar en el espacio profundo simulado durante 30 días. También ha fotografiado un concurso en el que estudiantes universitarios construyen rovers y los sueltan por paisajes marcianos simulados.
Klos participó en una simulación marciana en una árida franja del desierto de Utah, cerca de Hanksville. En la Mars Desert Research Station, los objetivos del experimento son vagamente similares a los de HI-SEAS, pero las tripulaciones solo van durante dos semanas. Más de mil «desernautas» han participado en la simulación. Durante su primera estancia en Marte, Klos fue la artista residente; en su segundo viaje, fue la comandante del grupo.
En el futuro, Klos podría fotografiar un experimento europeo que tiene lugar bajo tierra o una nueva simulación que se está disponiendo en Chile. Todo ello forma parte de su deseo de documentar el camino que sigue la humanidad hacia el planeta rojo.
«Creo que este proyecto no estará realmente completo hasta que la gente esté en Marte, algo que podría no ocurrir durante mi vida», afirma. «No pasa nada si mi trabajo de repente se vuelve obsoleto porque tenemos imágenes reales de personas en Marte».