Revista Nat Geo
Programación TV
Disney+
National Geographic
National Geographic
National Geographic
Ciencia
Animales
Historia
Medio Ambiente
Viajes
Ciencia
Animales
Historia
Medio Ambiente
Viajes
Página del fotógrafo
Lauren Owens Lambert
Un chingolo colifino adulto y cantarín posado sobre la maleza alta en las marismas de Kent Street, en Scituate (Massachusetts, Estados Unidos). Este pájaro podría ser incluido en breve en la Lista de Especies en Peligro, pero los científicos afirman que esto sólo aplazaría su inevitable extinción.
Logan Maxwell, directora del laboratorio Kovach de la Universidad de New Hampshire, examina el ADN del chingolo colifino. El ADN del gorrión de Nelson puede ayudar al chingolo colifino a adaptarse a los hábitats río arriba, pero también puede perder algunas de las características únicas que hacen que tenga tanto éxito viviendo en la costa.
El 24 de junio de 2021, biólogos del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU. examinan polluelos en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Rachael Carson. En el refugio, los chingolos colifinos se han estado reproduciendo con gorriones de Nelson, creando híbridos. Los chingolos colifinos tienen adaptaciones físicas únicas que les han permitido prosperar en las difíciles condiciones ambientales de las marismas.
Profundos y anchos canales de agua indican que esta marisma salada del Refugio Nacional de Vida Silvestre Edwin B. Forsythe, en Nueva Jersey, ha sido alterada drásticamente por el aprovechamiento humano de la tierra. En 2023, el estado recibió casi cinco millones de dólares en subvenciones medioambientales para restaurar la marisma, un importante lugar de cría de gorriones. Para restaurar la marisma, se modifican zanjas artificiales y se añaden sedimentos para recuperar el terreno perdido.
Benvenuti instala nidos de niebla en la marisma salobre del Refugio Nacional de Vida Silvestre Rachael Carson. Las redes atrapan a los gorriones en pleno vuelo para que los investigadores puedan recoger y registrar más fácilmente datos sobre las aves. Este refugio cuenta con el conjunto de datos más antiguo sobre el chingolo colifino.
El 16 de agosto de 2021, Adrienne Kovach, profesora asociada de Recursos Naturales de la Universidad de New Hampshire, a la izquierda, y Logan Maxwell, investigador científico del programa de investigación de hábitats y aves de marismas, a la derecha, recogen datos biológicos y anillan chingolo colifino en una marisma cercana a la playa estatal de Wallis Sands, en New Hampshire.
El 16 de agosto de 2021, Adrienne Kovach, profesora asociada de Recursos Naturales de la Universidad de New Hampshire, retira un chingolo colifino adulto de la red de niebla en la playa estatal de Wallis Sands, en New Hampshire.
Polluelos de chingolo colifino ahogados tras una marea alta en la Reserva Rachael Carson de Maine. A lo largo de la costa noreste de EE. UU., los mares están subiendo y haciendo que las mareas altas como estas sean más peligrosas para los gorriones jóvenes.
El 15 de agosto de 2022, la marea alta inundó un nido de chingolo colifino y lo dejó entre dos charcos de agua en el pantano de Eldridge Road, en Wells (Maine). Estos gorriones construyen sus nidos a poca altura del suelo, por lo que quedan a merced de la subida de las mareas.
Bri Benvenuti, técnica de la U.S. Fish and Wildlife en el momento en que se tomó esta foto, sostiene un chingolo colifino adulto. Benvenuti estaba estudiando el hábitat del ave en la isla de Monomoy, en Chatham (Massachusetts). La isla de Monomoy es uno de los pocos ecosistemas de marismas saladas que quedan intactos en Nueva Inglaterra y constituye un buen ejemplo de cómo deben funcionar estos ecosistemas.