Imágenes inéditas de un Jimmy Carter eufórico en su pueblo natal tras ser elegido Presidente de los EE. UU.
Jimmy Carter, que aún no era presidente, se enfrenta a la prensa en un partido de béisbol durante un descanso de la campaña electoral en agosto de 1976.
En el verano de 1976 remaba a regañadientes por el río Suwanee para un reportaje de National Geographic, uno de los primeros que hacía y para el que no estaba cualificada. En el fondo, yo era periodista, no aventurera.
En la cercana ciudad de Plains, en Georgia, Jimmy Carter estaba llevando a cabo su improbable campaña presidencial. Tenía que ir a echar un vistazo. Encontré un lugar a la vez encantador y complicado, como el propio Carter. Esta pequeña ciudad había dado forma a este agricultor de cacahuetes reconvertido en político y Plains fue la piedra de toque de su vida. Encontré las cosas que le definían (fe, humildad, compasión), las cosas que él, a su vez, ofrecía al mundo. El pueblo estaba entusiasmado con el éxito de su hijo predilecto.
Vista aérea del centro de Plains y sus emblemáticos escaparates al amanecer, en 1976.
La prensa internacional se agolpa en Plains, Georgia, durante la transición entre la victoria de Carter en las elecciones y la toma de posesión.
Encontré un cuerpo de prensa muy unido y con todos los grandes nombres: Barbara Walters, Tom Brokaw, Jane Pauley, Walter Cronkite. Era una campaña muy cercana que me dio la bienvenida. Gloria, la hermana de Jimmy, dijo que a su marido le gustaba tanto National Geographic que quería que lo enterraran con él en las manos. Su escandaloso hermano Billy, que dirigía la gasolinera local y creó su propia marca de cerveza, me presentó a Carter como fotógrafa de la revista Hustler [una publicación masculina para adultos]. La madre de Jimmy, la incontenible señorita Lillian, me dijo que tenía que hacer algo con mi pelo, aunque probablemente los hombres lo encontraran sexy. Esta era una campaña que definitivamente quería cubrir. Volví a Washington y propuse un reportaje sobre Plains.
Miss Lillian, la madre de Carter, en el Plains Depot, donde se sentaba en su mecedora para saludar a los visitantes y firmar autógrafos. Durante su apogeo, llegaban a visitarla 10 000 personas al día.
Jody Powell, secretaria de prensa de Carter, fotografiada con los presentadores del Today Show Jane Pauley y Tom Brokaw en el porche del Plains Depot, el apeadero ferroviario de la ciudad. El edificio se inauguró en 1976 como sede de la campaña presidencial de Jimmy Carter. Construido en 1888, es la construcción más antigua de Plains, y sirvió como parada ferroviaria de mercancías y pasajeros hasta 1951, cuando se interrumpió el servicio de pasajeros.
Los vecinos de al lado de la Srta. Lillian, la madre del presidente Carter. Vivían en una casa de una sola habitación, sin agua corriente y con una estufa de leña para calentarse.
Residentes de Plains en una reunión comunitaria.
Billy Carter, el polémico hermano del expresidente, en de la gasolinera que regentaba y de la que era propietario. Comprada en 1972, en su mejor momento, Billy vendía 2000 cajas de cerveza al mes y más de 150 000 litros de gasolina. En 2009, la gasolinera se convirtió en el Museo de la Estación de Servicio Billy Carter.
Amy Carter, hija de Carter, monta en bicicleta con su profesora, Jan Williams.
El carro de mulas "Peanut II" ofrecía paseos por Plains a los residentes y visitantes que empezaron a inundar la ciudad durante la campaña.
Los jubilosos habitantes de Plains y amigos y simpatizantes de Carter (380 de ellos) viajan en el "Peanut Special", un tren fletado por Amtrak que les lleva a la toma de posesión en Washington, D.C.
El presidente Carter y su familia caminan por la Avenida Pennsylvania desde su juramento en el Capitolio hasta la Casa Blanca, desafiando el frío. Fue el primer presidente que hizo ese recorrido, ahora emblemático.
Una sonriente Jodi Cobb, una de las primeras fotógrafas de Nat Geo, se prepara para trabajar el día de la toma de posesión de Carter.
A puerta cerrada, estaban sucediendo cosas serias pero, a su alrededor, todo era alegría y diversión. Carter estaba rodeado de amor. Un grupo de 380 personas, entre los que había amigos y partidarios jubilosos del ya elegido presidente de los Estados Unidos, se subieron a un tren Amtrak fletado, apodado el "Peanut Special", y festejaron todo el camino hasta la toma de posesión de Carter en Washington, D.C. Fue un viaje inolvidable.
La lista de logros importantes del presidente Carter es larga y, a pesar de sus conocidos fracasos, probablemente será recordado como uno de los grandes (y posiblemente el mejor expresidente) que ha tenido Estados Unidos. Estoy agradecida por haberme desviado para conocer el pueblo.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.