La India, el tallo sumergido de la polución en el Ganges
Una persona en cuclillas en la orilla de un río contaminado en la India.
28 de noviembre de 2011
Nuevas leyes prohíben la construcción de bloques de viviendas en detrimento de la contaminación del agua.
A medida que los niveles de polución siguen creciendo en el Ganges, las leyes de medioambiente también cambian para proteger el río sagrado.
La semana pasada, el tribunal de Allahabad, en el estado norteño de Utar Pradesh, ordenó el cierre de más de 100 curtidurías que arrojaban toneladas de cromo tóxico al Ganges en la zona industrial de Kanpur cada año.
La nueva legislación es la última de una serie de decisiones tomadas por el ya mencionado foro que ha parado las construcciones en la rivera del Ganges, y ha ordenado crear plantas de tratamiento de residuos en sus orillas.
“Si se termina con éxito, será la hazaña más importante de mi vida,” según ha dicho en una declaración pública Arun K. Gupta, que tomó parte en la ordenanza.
En el Allahabad se unen tres ríos sagrados:
El Ganges, nacido en el pulcro Himalaya, que primero se desliza y luego va ganado bravura a lo largo de la frontera entre la India y el Tibet. La hermana del Ganges se llama Yamuna, y lo ensombrece al paso por el Oeste antes de pasar Delhi y el Taj Mahal; y por último el mítico Saraswati, ancestral e invisible, que según la leyenda fluye a través de la tierra.
Durante la estación seca, el Ganges renquea hacia la ciudad, oscuro, con residuos y materiales industriales. La contaminación es intensa aun cuando nos encontramos en puntos álgidos del monzón. El Yamuna llega cargado con los restos fecales de Nueva Delhi, con cifras aproximadas a los 1.900 millones de litros sin tratar por día.
Estas aguas se unen en uno de los lugares más sagrados de Hinduismo, Allahabad, que en Persa significa “Asentamiento de Dios”, y todos los años hospeda el Kumbh Mela, el mayor desplazamiento humano del globo, y decenas de millones de peregrinos se reúnen en la confluencia de los tres ríos para limpiar sus pecados.
Una visita reciente al Triveni Sangam, (nombre dado a la confluencia), encontró a cientos de peregrinos caminando bajo un resplandeciente sol blanco mientras se bañaban y recogían agua en botellas de plástico para llevárselas a casa. S.P.
Pandey, un juez recién jubilado dirigió una visita en dirección a un lugar de expansión de agua y señaló que “ahí está el Sangam”.
Posiblemente un ojo desentrenado pudiese ver solamente dos ríos uniéndose, pero antes de que el Yamuna se una al Ganges, podemos ver como el primero tiene un color azul vacío, mientras que el segundo, cuenta con un tono amarillo turbio.
¿Dualidad?
Hay una extraña dualidad en la confluencia de estos ríos en la India.
El ancestral Ganges, inequívocamente sagrado, y testigo de miles de años de cultos religiosos por un lado, por otro es, la fosa séptica de la india.
Los esfuerzos del pasado han fallado por enormes errores de planificación, implementación y administración, según el profesor B.D. Tripathi, del centro de Ciencias medioambientales y Tecnología de la Universidad indú de Benares.
Un nuevo plan para limpiar el millón de kilómetros cuadrados de la cuenca del Ganges tendrá un coste de decenas de millones de dólares, de acuerdo con el Banco Mundial.
De cualquier forma, cambios importantes se están dando en el suelo, gracias en parte a la nueva legislación por parte del alto tribunal de Allahabad. Varias de las medidas planteadas son:
- Se han echado por tierra los proyectos de mil kilómetros de autopista y unos enormes bloques de viviendas que se planteaban construir en zonas de inundación del río.
- Construcción de más de una docena de plantas de tratamiento de residuos en Kanpur, Allahabad y Varanasi.
- Frenado de la dispersión del río para proyectos de irrigación y utilización urbana de este.
- Cierre de curtidurías en Kanpur.
Estas pautas, de ser respetadas y llevadas a cabo, cambiarían años de tradiciones, costando a los desarrolladores y a los empresarios millones de dólares, por no contar con la oposición de burócratas y políticos interesados en grandes proyectos industriales.
Problemas de polución
La polución ha empeorado en el Ganges durante los años que Gupta y otros han estado luchando en los juzgados, de acuerdo con los datos obtenidos por National Geographic News.
En la zona en la cual se unen el Ganges y el canal de residuos Salori, la demanda bioquímica de oxigeno (una medida de polución) se ha incrementado de una media de 3,5 miligramos por litro a 5 entre los años 2006 y 2011. El límite gubernamental está en 3 mg/l.
Los coliformos han alcanzado una media de 15000 MPN* por cada 100 milímetros en Salori en Septiembre del 2010, cayendo a 8875 MPN por cada 100 milímetros unas millas más lejos de la confluencia.
El límite gubernamental para los ríos es de 500 MPN/100 ml.
En Kampur, los niveles de Cromo superan en cien veces el límite oficial.
En 2013, el Kumbh Mela volverá a Allahabad…según el pronóstico de Arun K. Gupta, cerca del 60% de los 70 canales que arrojan residuos humanos al río en Allahabad habrán sido cerrados, haciendo que los millones de peregrinos puedan disfrutar de un río sagrado más limpio y salubre.
*MPN son las siglas de “Numero Más Probable”, una medida científica utilizada para estimar el número de microbios de una muestra.