¿Qué es el manto de nieve y por qué es tan importante?
Hasta una treintena de provincias españolas se han visto afectadas este invierno por una inusitada acumulación de nieve. Un fenómeno que, en California, podría aprovecharse para llenar los exhaustos y sedientos embalses del estado.
La nieve descansa sobre los árboles del Parque Nacional de Yosemite tras la última de una serie de tormentas que azotaron California en enero de 2023. En California ha nevado una cantidad inusualmente alta, lo que ha llevado la capa de nieve a niveles casi récord y ha traído esperanzas de aliviar la larga sequía del estado.
Entre 2022 y 2023, España ha vivido un invierno cálido con pocas precipitaciones y la nieve no ha llegado tampoco en los niveles de otros años. Todo lo contrario que otra región del planeta conocida por sus altas temperaturas y preocupada por la sequía, California, que registraba un panorama contrario e insólito. Por eso lo que en la costa oeste se ve como una posible bendición en la península ibérica se percibe como preocupación: el grosor del manto de nieve o manto nivoso.
La acumulación de nieve en California podría tener consecuencias positivas: mientras el estado se recupera de las asombrosas nevadas acumuladas, muchos se plantean una pregunta acuciante: ¿podrán los niveles casi récord de nieve ser suficientes para llenar los embalses del estado y romper la sequía que durante tanto tiempo ha asolado la región?
Esto dependerá de algo llamado manto de nieve, que es esencial para volver a llenar los embalses del estado. Karla Nemeth, directora del Departamento de Recursos Hídricos de California, ha dicho en un comunicado que la capa de nieve de Sierra Nevada (California) está alcanzando niveles récord. Pero, añadió, "también hará falta más de un buen año para iniciar la recuperación".
Entonces, ¿qué es exactamente el manto de nieve que tanta ilusión genera en California y que en 2023 no hemos visto en España? A continuación te lo explicamos.
Vista del lago Topaz desde el borde oriental nevado de Sierra Nevada, en la frontera entre California y Nevada. Cuando el manto de nieve de la montaña se derrite cada primavera, el lago sirve de depósito para el agua de escorrentía.
¿Qué es un manto de nieve?
El manto de nieve o manto nivoso es exactamente lo que parece: capas de nieve amontonadas en el suelo. Esto ocurre cuando la nieve cae en zonas montañosas con temperaturas bajo cero, lo que permite que se acumule en el suelo y permanezca durante meses. Con cada nueva capa de nieve en polvo, el manto se vuelve más profundo y compacto.
Cuando las temperaturas empiezan a subir, el manto de nieve comienza a derretirse lentamente, llenando los ríos, embalses y acuíferos subterráneos circundantes durante los meses de primavera y verano. El agua almacenada en el manto de nieve se denomina deshielo.
La temperatura y el viento influyen en la profundidad del manto: los vientos fuertes pueden erosionar las capas superiores, mientras que las altas temperaturas pueden hacer que se derrita demasiado pronto.
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Tras años de sequía, el mayor embalse de California, el lago Shasta, alcanzó niveles históricamente bajos en el verano de 2022.
¿Por qué es importante el manto de nieve?
Los estados de la costa oeste de Estados Unidos (y muchas partes de España) dependen de la nieve para pasar la estación seca y calurosa que, con el cambio climático, cada vez es más seca y calurosa. En California, el manto de nieve de la Sierra, por ejemplo, suministra aproximadamente un tercio del agua del Estados, mientras que las Rocosas son fuentes esenciales de agua para estados como Arizona y Nuevo México.
Y no sólo afecta al agua potable. Muchas regiones también dependen del manto de nieve para la energía hidroeléctrica y el riego para cultivar frutas, frutos secos y otros productos.
La naturaleza también depende del manto de nieve, según la Escuela de Medio Ambiente de Yale. Los glotones, por ejemplo, construyen sus madrigueras en lo alto de las montañas, donde la capa de nieve es demasiado densa para que los depredadores puedan seguirlos. La capa de nieve aísla las raíces de los árboles para protegerlas de las temperaturas bajo tierra y sirve de camuflaje a los animales de pelaje blanco. Los cambios en el momento del deshielo o en su abundancia también pueden perturbar el desove de los peces.
Por último, los seres humanos también dependen de ella para el ocio. Los ávidos esquiadores y aficionados al snowboard suelen estar al tanto de la cantidad de nieve acumulada en sus pistas favoritas, ya que una capa de nieve más profunda puede prolongar la temporada de esquí, mientras que una capa de nieve poco profunda puede provocar avalanchas.
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El ganado se reúne alrededor de un estanque en un rancho de Snelling, California, en mayo de 2021, cuando el estado entró en emergencia por sequía extrema. El cambio climático está provocando una disminución de los niveles de nieve en todo el estado y contribuyendo a las condiciones de sequía.
Unos almendros muertos yacen en un descampado después de que un agricultor los talara por falta de agua para regarlos en Huron, California, en 2021, una zona azotada por la sequía.
Cambio climático y manto de nieve
A pesar de las épicas temporadas de nieve, el cambio climático está provocando un descenso del manto de nieve en EE.UU. Según la Agencia de Protección del Medio Ambiente de EE.UU., entre 1955 y 2022, el manto nivoso se redujo en un 23%. Este descenso es especialmente acusado en el estado de Washington, Oregón, el norte de California y el norte de las Montañas Rocosas.
El aumento de las temperaturas en invierno y primavera también está provocando que la nieve se derrita antes que en el pasado. La EPA señala que la duración de la "temporada de nieve", como se denomina, ha disminuido 18 días de media. Este cambio significa que la escorrentía de la nieve derretida no dura tanto en verano como antes, por lo que los embalses vuelven a secarse.
Más allá de la sequía, esto tiene otras implicaciones para el Oeste de Estados Unidos. Los estudios demuestran que un deshielo más temprano provoca más incendios forestales y temporadas de incendios más largas. Como ya ha informado Nat Geo, esto se debe a que las plantas y el suelo tienen más tiempo para secarse, lo que los hace más susceptibles de arder.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.
