EE. UU. prepara una espectacular ruta en tren que atraviesa todo el país
El Great American Rail-Trail unirá pueblos y ciudades a lo largo de una ruta de casi 6000 kilómetros que utilizará docenas de vías de ferrocarril antiguas.
El Cowboy Recreation and Nature Trail de Nebraska, de 352 kilómetros, uno de los senderos ferroviarios más largos del país, conecta con el nuevo Great American Rail-Trail, una ruta multiusos de 5954 kilómetros a campo traviesa.
Cuando esté terminado, el ambicioso Great American Rail-Trail llevará a senderistas y ciclistas por todo Estados Unidos, desde la capital., Washington D.C., hasta el estado de Washington, junto al Pacífico. No sólo será un viaje épico desde las montañas hasta las llanuras y las cristalinas aguas del Pacífico, sino que también contribuirá a revitalizar decenas de comunidades a lo largo del trayecto.
"El modo en que el Great American puede ayudar a las comunidades fue uno de los criterios más importantes para determinar su destino", explica Liz Thorstensen, de Rails-To-Trails Conservancy, la organización que supervisa el proyecto.
Una historia de renacimiento
Durante gran parte del siglo XX, el Medio Oeste estadounidense fue una potencia industrial que utilizaba los trenes para transportar mercancías de Nueva York a Wisconsin. Pero al disminuir la demanda manufacturera, miles de kilómetros de vías férreas que serpenteaban por pueblos y ciudades del Medio Oeste quedaron inutilizados.
Ahora, esas mismas vías (convertidas en senderos ferroviarios) ofrecen nuevas oportunidades y reconstruyen y reconectan enclaves antaño prósperos.
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Esta fotografía compuesta, tomada en el transcurso de un día, muestra la playa de Shi Shi, en el Parque Nacional Olímpico de Washington, el otro extremo de la Gran Americana.
El National Mall de Washington, D.C. (en esta fotografía compuesta, tomada durante 16 horas), es uno de los extremos del Great American Rail-Trail.
Este "Gran Americano", que recorrerá 5954 kilómetros a través de 12 estados y Washington D.C., comenzará (o terminará) en el National Mall, en el centro de de la capital. La ruta ofrecerá paisajes y experiencias emblemáticas, cruzando los Montes Apalaches y el caudaloso río Misisipi. Más al oeste, ascenderá por la divisoria continental al este de Butte (Montana) y atravesará Puget Sound en Seattle, antes de llegar al océano Pacífico en La Push, en el estado de Washington.
Con más del 50% de su trazado finalizado (podrían pasar otros 20 años hasta que toda la vía esté conectada), la ruta ya está experimentando una creciente demanda de campings, servicios de reparación de bicicletas, restaurantes y cervecerías, así como un sinfín de otras actividades y locales a lo largo del camino.
La organización Rails-To-Trails Conservancy calcula que 50 millones de estadounidenses viven en un radio de 80 km del trazado propuesto de más de 145 vías férreas, vías verdes y otros senderos polivalentes. Según un informe de mayo de 2022, cuando esté terminado, el Great American podría generar cerca de 214 millones de euros anuales en gastos de visitantes y 25 000 nuevos puestos de trabajo en 10 años para las comunidades situadas en la ruta o cerca de ella.
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A todo gas
Muncie (Indiana), una ciudad de 65 000 habitantes, es una de las muchas pequeñas localidades dispuestas a dar un nuevo uso a sus otrora bulliciosas vías férreas.
"El hecho de ser una vía pavimentada y multiusos nos sitúa como una vía de primera para visitar", afirma Angie Pool, responsable de Cardinal Greenways, un tramo de 100 kilómetros a lo largo de la Great American que pasa por Muncie. "El Great American Rail-Trail no hará sino mejorar esta oportunidad para los amantes del trail-riding de todo el país".
Para negocios como Kirk's Bike Shop, un establecimiento de Muncie fundado en 1865 y situado a menos de un kilómetro y medio del sendero, esto podría suponer un gran impulso.
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El Great American invita a los visitantes a explorar las zonas menos transitadas de Estados Unidos, como el Parque Estatal de Steptoe Butte, en Washington.
Los habitantes de Muncie (Indiana) esperan que la Gran Americana traiga nuevas oportunidades económicas y acontecimientos sociales, como la carrera Ironman que aparece en la foto.
"La gran mayoría de nuestros clientes son locales, pero [el Great American] podría ayudar a aumentar el turismo. También podría abrir los ojos de la gente local a lo que hay ahí fuera", afirma Jason Allardt, propietario de la tienda.
En Muncie, la ruta conecta con el Museo y Jardines Minnetrista, un lugar emblemático de la ciudad con 16 hectáreas de huertos y jardines, un mercado de agricultores y talleres de fabricación de conservas y vidrio abiertos al público. También hay cerca cafeterías, cervecerías y restaurantes.
En el oeste de Iowa, Council Bluffs se ha embarcado en un gran proyecto de revitalización urbana cerca de los tramos de la Great American que pasan por el corazón de la ciudad. Alrededor del 60% de los habitantes de la ciudad viven a menos de un kilómetro y medio de la vía férrea de la Primera Avenida, que se está convirtiendo en un "parque lineal" con plazas, estructuras de sombra y zonas verdes. Inaugurado oficialmente esta primavera, servirá también como importante corredor de transporte.
"Queremos que la gente pueda llegar a su trabajo y, pensando en los desplazamientos diarios, hemos invertido mucho dinero en la iluminación del sendero para que pueda utilizarse las 24 horas del día y hemos dado prioridad a la limpieza de la nieve", explica Brandon Garrett, jefe de personal de la ciudad de Council Bluffs.
Una mujer corre por las Cardinal Greenways, la vía férrea más larga de Indiana.
Los promotores optaron por una superficie de asfalto para que fuera más adecuada para los corredores y las personas que utilizan medios de transporte con ruedas, como andadores, cochecitos, sillas de ruedas y sillas eléctricas.
"Formamos parte de un área metropolitana que es la mayor [de la ruta Great American] entre Chicago y Seattle, así que tanto si los viajeros atraviesan Iowa o Nebraska como si hacen un tramo más largo, probablemente pasen por aquí como parada principal de su aventura", dice Garrett.
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La naturaleza al final del camino
A casi 2414 kilómetros al oeste de Council Bluffs, una historia similar se desarrolla en Port Angeles, una comunidad de unos 20 000 habitantes en el estado de Washington. Allí, las líneas de ferrocarril construidas y ampliadas en el siglo XIX son ahora el lugar donde los viajeros pueden avistar orcas y focas en el tramo Olympic Discovery Trail de la Great American. Más al oeste, atraviesa la sección septentrional del impresionante Parque Nacional Olímpico.
Comenzando en la frontera entre Maryland y Pensilvania, el Great Allegheny Passage, de 241 kilómetros, es una de las varias rutas preexistentes que ahora forman parte de la Great American.
Con la ruta Great American a punto de pasar por el centro de Port Angeles, los vecinos ya están construyendo nuevas infraestructuras para el sendero. El año pasado se inauguró una tienda de reparación de bicicletas en un lugar del centro de Port Angeles que antes estaba vacío, y los hoteles de la zona han empezado a suministrar bicicletas eléctricas a sus clientes para que las utilicen en la ruta.
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"Ya hay gente que recorre el país en bicicleta y se detiene aquí. [La Great American] no hará sino mejorar y ampliar esta situación", afirma Jeff Bohman, de la Peninsula Trails Coalition, un grupo de defensa local.
Aunque los viajeros ya pueden aprovechar la ruta, aún quedan más de 80 lagunas, incluidos grandes tramos de rutas sin cartografiar en Wyoming y Montana.
"A veces es la geografía la que presenta un desafío, o hay un puente concreto que necesita ser rehabilitado", dice Thorstensen. "Se trata de conseguir la financiación".
Aun así, en los últimos años se han registrado grandes avances. Desde que se anunció por primera vez un plan de ruta en 2019, se han conseguido más de 70 millones de euros en financiación pública y privada para ayudar a construir el sendero. Actualmente están en desarrollo más de 160 kilómetros.
Stephen Starr es un periodista irlandés y escritor que ha trabajado en Oriente Próximo durante una década antes de trasladarse a Ohio. Puedes seguirle en Twitter e Instagram.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.