Seis ciudades insólitas para los amantes de la comida
Degusta un pedacito de cada extremo del mundo.
12 de enero de 2017
Milán, hazte a un lado. Con esta guía de la mejor comida de (casi) todos los continentes podrás probar un pedacito los destinos gastronómicos más sorprendentes.
EUROPA
Budapest, Hungría
El río Danubio atraviesa esta capital europea (dividiéndola en Buda, en una orilla, y Pest, en la otra) que muchas veces pasa desapercibida, pero su escena gastronómica está empezando a causar revuelo.
El mejor barrio para un frenesí gastronómico
Si tu estancia en Budapest va a ser corta, pasa todo tu tiempo en el séptimo distrito. No hay ninguna razón para salir de este barrio de moda (también conocido como el Barrio Judío) con su abundante oferta de comida internacional y de bares bulliciosos. Karaván es el sueño de todo “foodie”: cervecerías al aire libre rodeadas de puestos de comida callejeros que sirven los platos tradicionales junto con las nuevas tendencias gastronómicas. No puedes irte sin probar el lángos, pan aplanado frito que se sirve normalmente con queso gratinado y crema agria. El New York Café del siglo XIX se autoproclama la cafetería más bonita del mundo, algo que es difícil de negar. La comida está a la altura del ornamentado interior (una combinación de mármol, pan de oro y terciopelo rojo). Para un cambio total de atmósfera, dirígete a Szimpla Kert para tomar unas copas o un tentempié nocturno. Este lugar único es uno de los “pubs en ruinas” de Budapest, restaurantes en edificios viejos y abandonados.
El mejor barrio para una comida sofisticada
El distrito del castillo es la zona más antigua de la ciudad de Budapest, con el castillo de Buda levantándose a lo largo del Danubio. Entre los emplazamientos medievales, las bulliciosas calles y las encantadoras casas se pueden encontrar algunos de los mejores restaurantes de la ciudad. El Alárbados, un restaurante cercano abierto desde 1964, ha recibido galardones por su comida. Renovado recientemente, ofrece exclusivamente platos con ingredientes húngaros. Pide el menú de elección secreta del chef. Si eres un aficionado del caviar, dirígete a Arany Kaviár, un opulento restaurante con vistas a unos jardines. Existe una amplia selección de caviares húngaro y ruso, y los dueños del restaurante también ofrecen uno de elaboración propia.
El mejor barrio para hacer la compra
En Budapest, los mercados no son precisamente escasos, pero si quieres probar lo mejor de lo mejor dirígete al noveno distrito. En el Mercado Central de Budapest, en la orilla del puente de la Libertad que da a Pest, podrás conseguir todo lo que necesitas (y mucho más) para preparar una comida. Este gigantesco emporio de tres plantas se construyó a principios del siglo XX, resultando dañado durante la Segunda Guerra Mundial, por lo que fue restaurado en la década de 1990. Haz peregrinaje hasta allí para encontrar carnes y quesos locales, entre otros productos, así como especias (el pimentón ahumado es un básico), repostería y suvenires.
ASIA
Ereván, Armenia
Ereván es una ciudad floreciente. La capital de Armenia (un diminuto país cuya belleza natural, cultura y creciente industria turística han hecho que figure en nuestra lista de 10 países que merecen más visitantes) derrocha encanto y goza de suficientes lugares para comer y mantener tu estómago felizmente lleno.
El mejor barrio para un frenesí gastronómico
Si quieres comer bien, escoge la plaza de Charles Aznavour como punto de partida y empieza a explorar desde ahí. Comienza con un desayuno a base de gofres o tostadas francesas en el ArtBridge Bookstore Café. Al entrar podrás comprar una guía de Ereván o unas postales, ya que el café es también una popular librería. Tras una mañana de turismo, dirígete a Khinkali para comer el tradicional khinkali georgiano, unas grandes bolas de masa que normalmente se rellenan con carne de ternera picada y cilantro. Por la tarde, recarga las pilas con un café con hielo o relájate con un vaso de vino en Martini Royale, un diáfano y moderno café italiano que da justo a la plaza. Consigue una mesa cerca de los ventanales que van del suelo al techo, donde podrás observar a las personas al pasar. Para terminar el día, ve a Dolmama. El interior de este restaurante de la calle Pushkin, de tonos cálidos, parece una antigua obra maestra de la pintura, y la comida tradicional oriental armenia es igual de apetecible. El plato principal es el dolmas, carne y arroz envueltos en hojas de parra.
El mejor barrio para una barbacoa armenia
Armenia es conocida por el khorovats, carne asada en una brocheta, y el mejor lugar para el khorovats en Ereván es la calle Proshyan (que se convierte en la calle Paronyan). La calle de las barbacoas, como se conoce popularmente, está llena de restaurantes de khorovats (prueba Urartu) y de parrillas en la calle.
El mejor barrio para tomarse un café
Pasa una tarde (o más de una) en el barrio en torno a la Cascada, una larguísima escalera que une el centro de la ciudad de Ereván al barrio monumental. En Charles, que sirve tanto platos europeos como armenios, hay un área al aire libre que es perfecta para disfrutar las noches más agradables. Te recomendamos el confit de cordero. Unas cuantas manzanas al sur, el Malocco Café es un lugar ideal y confortable para tomarte un café o una copa de vino. Pero deja sitio para el postre y dirígete a la Chocolatería Cascade, una tienda de café y chocolate. Atrévete a probar la fondue de chocolate o date un capricho unas cuantas trufas, entre otros muchos dulces.
NORTE AMÉRICA
Detroit, Estados Unidos
Espera, ¿Detroit? En efecto. La ciudad referente para los fabricantes de automóviles está actualmente calentando sus motores culinarios.
El mejor barrio para un frenesí gastronómico
El barrio más antiguo de la ciudad, Corktown (los primeros inmigrantes procedían del condado de Cork, en Irlanda), es también uno de los más bulliciosos. Allí podrás encontrar todo tipo de restaurantes, desde cafeterías en las que desayunar hasta restaurantes elegantes. Prueba la “poutine” para desayunar en el patio del Brooklyn Street Local o el pato picado en Dime Store. Para comer, dirígete a Onassis Coney Island para un clásico de Detroit: el perrito Coney, un perrito caliente con salsa de chili, cebollas y mostaza, o ve al Slows Bar BQ si prefieres carne de vacuno o cerdo desmechado. Cuando vuelvas a sentirte hambriento, visita Katoi, un nuevo restaurante de moda de cocina del sureste asiático. Te recomendamos la sopa khao soi kai de fideos al curry.
El mejor barrio para gastronomía étnica
En lo referente a comida étnica, Detroit puede presumir de tener de uno de los mejores barrios del país. Las numerosas tabernas de Greektown sirven hojas de parra rellenas, souvlaki y musaca acompañados de generosas copas de ouzo. New Parthenon es uno de los básicos y ha estado abierto durante más de 40 años. Hamtramck, al norte del centro de la ciudad, es un enclave polaco. Ve al Polish Village Café o a Krakus para probar platos tradicionales como el golabki (repollo relleno) y los pierogi (pasta rellena de diferentes tipos y variedades de vegetal). El barrio periférico de Dearborn alberga uno de los porcentajes más altos de árabes-americanos, lo que se ve reflejado en sus restaurantes. Al Ameer es popular por su shawarma, su falafel y su hummus (Sheeba y Hamido también merecen la pena).
El mejor barrio para salir por la noche
El barrio de Midtown alberga muchos bares y restaurantes perfectos para una noche de diversión. Grey Ghost (bautizado con el nombre de un proveedor de ron durante la época de la Ley Seca) ofrece los bocados más inusuales, como mortadela frita sobre un gofre, así como platos más tradicionales como chuletones de ternera. La Feria es un bar de tapas muy popular (no dejes de probar los calamares fritos) y Selden Standard es un restaurante del tipo “de la granja a la mesa” (los fritos salados de bacalao con pimientos dulces son el destacado de la carta).
SUDAMÉRICA
Santiago de Chile
Con una mezcla de culturas y sabores españoles e indígenas, la capital chilena posee barrios repletos de restaurantes, bares y mercados.
El mejor barrio para un frenesí gastronómico
Para un día dedicado a la buena comida, visita el Barrio Lastarria, un vecindario histórico que ahora está repleto de hipsters y de tiendas y restaurantes de moda. Empieza con café y desayuno en Colmado. Pide un capuchino y un pincho de tortilla y tómatelo en el piso de arriba o en la entrada al patio. Cuando hayas cargado las pilas, puedes optar por pasear y mirar escaparates. Para comer te recomendamos un sándwich de pavo ahumado, mozzarella y crema de albahaca en el Café del Museo, junto al Museo Arqueológico de Santiago. Por la tarde, empieza a abrir el apetito para la cena. Prepárate para esperar tu mesa en Bocanáriz, uno de los restaurantes más populares de la ciudad. Esta aclamada vinoteca ofrece vinos chilenos, pudiendo presumir de una carta de casi 400. Los camareros, que son también sumilleres, te ayudarán a escoger el mejor vino para acompañar tu cena.
Los mejores barrios para hacer la compra
Situado entre el mar y la montaña, Santiago tiene lo mejor de ambos mundos en lo referente a ingredientes. Podrás construir tu propio plato a partir de los víveres que compres cerca de Cerro Santa Lucía y en Recoleta. Si buscas marisco, ve al Mercado Central (que se encuentra entre nuestro Top 10 de mercados gastronómicos), una bulliciosa maravilla del modernismo. Compra merluza recién capturada o toma un bocado rápido en alguno de los restaurantes del interior. Unas manzanas al norte encontrarás La Vega, un enorme mercado interior donde puedes conseguir frutas y verduras frescas, especias, carnes y mucho más.
El mejor barrio para una experiencia única
Aunque es bastante tranquilo durante el día, Bellavista cobra vida por las noches con sus bares y restaurantes. Uno que no te puedes perder es Peumayén, que sirve “comida ancestral”, concretamente platos de la época prehispánica. El menú cambia frecuentemente pero siempre emplea ingredientes auténticos. Como Agua Para Chocolate recibe su nombre del libro de Laura Esquivel. El decorado es excesivamente romántico, con una fuente en el centro y una cama convertida en mesa, pero la comida chilena está a la altura de las expectativas. De hecho, esta comida gustaba tanto a Pablo Neruda, el respetado poeta chileno, que incluso le escribió odas: sal, una cebolla, incluso un “gran atún del mercado”. El Mesón Nerudiano le devolvió el favor, rindiendo honor al artista con una atmósfera “inspirada por la inconfundible magia y estilo” de sus casas, una de las cuales se encuentra a apenas unas manzanas de distancia. En el menú figuran ingredientes y platos sobre los que escribió Neruda.
ÁFRICA
Dakar, Senegal
Sobre un pedazo de tierra que penetra en el Atlántico, la capital senegalesa y mayor ciudad del país está llena de colorido, movimiento y ruido. También alberga una escena gastronómica llena de sabores que mezcla estilos franceses, libaneses y del África occidental.
El mejor barrio de comida callejera
Parte del frecuentado camino turístico en la Medina. Este distrito es un laberinto de tiendas, casas y vendedores, y alberga la Grande Mosquée de Dakar. Allí, la mejor comida es la de los puestos ambulantes y cocinas al aire libre, así que sigue tu olfato y llénate mientras paseas. No dejes de probar los accara (fritos de alubias) o el dibi (cordero asado picante cocinado con cebollas y servido revuelto sobre papel marrón).
El mejor barrio para marisco fresco
En Dakar se puede encontrar buen marisco en todas partes, debido a su localización en una península. Pero si quieres un frescor del tipo “recién cogido a solo unos metros”, dirígete a Ngor, un barrio popular junto a la playa. Las opciones van desde cabañas frente a la arena a restaurantes con servicio completo. Prueba el diáfano Noflaye Beach sobre el agua, si quieres pescado a la parrilla y crepes dulces. Para más diversión, ve a la diminuta Île de Ngor. Simplemente tienes que subirte al barco de Chez Seck y podrás comer en un colorido lugar justo sobre el mar.
El mejor barrio para un frenesí gastronómico
El distrito central de Dakar, Plateua, puede mantener ocupado a un foodie a cualquier hora del día. Hay pastelerías como La Royaltine y Artisan Boulanger Eric Kayser, en las que puedes comprar pan y dulces. Para disfrutar de unas fantásticas vistas de la Île de Gorée y de un menú con especialidades francesas y senegalesas, ve a Lagon I, construido sobre pilones. Y si quieres probar las mejores especialidades libanesas como el meze, el shawarma o el falafel, dirígete al restaurante Farid, un espacio elegante con mesas en el patio. Pero el lugar más popular para comer seguramente sea Chez Loutcha, un restaurante sin florituras y en ocasiones caótico perfecto para probar la cocina africana occidental.
AUSTRALIA Y OCEANÍA
Wellington, Nueva Zelanda
Aunque normalmente se ve ensombrecida por Oakland, la capital de Nueva Zelanda tiene su propia reputación como destino culinario.
El mejor barrio para un frenesí gastronómico
Cuba Street es la zona más popular de Wellington, albergando restaurantes y bares de moda y tesoros ocultos. Matterhorn, descrito como “el punto de reunión de los expertos creativos”, es oscuro y deprimente, y sirve una mezcla de platos contemporáneos. Logan Brown, un restaurante elegante y respetuoso con el medio ambiente situado en una antigua sucursal del National Bank de Nueva Zelanda, ofrece platos que tienen como base ingredientes locales y de temporada. Y el precioso Olive es un festín para los ojos tanto como lo es para el paladar: prueba la comida mediterránea en su patio tropical. ¿Quieres algo más inusual? Prueba Laundry, un bar y restaurante que mantiene la apariencia exterior de su vida anterior como lavandería. Su menú de “soul food” incluye gumbo y pollo salteado.
El mejor barrio para comer en la playa
El (súper) colorido Maranui Café sirve uno de los mejores cafés del lugar, así como platos ligeros (muchos de ellos veganos) y batidos, justo sobre el agua. Los fans de la aviación pueden saciar su apetito en Spruce Goose, un restaurante en un edificio inicialmente pensado para un aeropuerto con vistas tanto a la pista como a la bahía de Lyall. Y el local de la vieja escuela Seaview Takeaways, toda una institución en la bahía de Lyall, se especializa en fish-and-chips.
El mejor barrio para hacer la compra
Existe un lugar al que ir en Wellington si buscas los productos, carnes y mariscos más frescos: el paseo marítimo. Harbourside Market, que funciona desde 1920, tiene docenas de puestos (que venden de todo, desde especias a flores) y restaurantes (desde burritos a barbacoa). El Underground Market es un escaparate para panaderos, diseñadores y artistas. Compra churros recién hechos o algodón de azúcar rosa y haz una parada en el cercano Wellington Sea Market en el muelle Lambton (también hay uno en Cuba Street) si quieres pescado recién capturado.