Los cruceros fluviales te permiten disfrutar de las maravillas históricas
Un viaje por río puede llevarte al corazón de un lugar desconocido y también librarte del estrés del recorrido. La navegación fluvial es una aventura por los valles de ríos legendarios, como el Danubio, el Rin o el Yangtsé.
Un viaje por río puede llevarte al corazón de un lugar desconocido y también librarte del estrés del recorrido. La navegación fluvial es una aventura por los valles de ríos legendarios, como el Danubio, el Rin o el Yangtsé. Es un medio de transporte lento, pero eso puede ser bueno si exploras tierras ricas en belleza e historia. Además de grandes ciudades, en un crucero puedes contemplar zonas en el camino, profundizando en el núcleo de un país: aldeas, castillos y campos a lo largo de los canales fluviales que dieron vida a su civilización. Puedes encontrar tesoros culturales —la plaza de un pueblo en Navidad, una abadía de siglos de antigüedad, un mercado flotante en Tailandia o un templo del antiguo Egipto— sin tener que navegar tú mismo. Evitas vuelos, hoteles y vías. Y algunos cruceros navegan por la noche, ahorrando tiempo para experimentar más naturaleza y cultura. En comparación con los buques marinos, un crucero fluvial es un medio menos agitado, lo que te permite apreciar el despliegue del paisaje.