Un elefante salvaje carga contra un hombre en una plantación de té
Esta interacción pone de relieve la complicada historia que comparten agricultores y elefantes.
El conflicto entre humanos y elefantes no es nuevo en la India, donde personas y paquidermos han coexistido durante milenios. Pero un nuevo vídeo grabado el 29 de junio de 2018 en una plantación de té de Munnar, al sur del país, muestra los peligros de acercarse demasiado a estos enormes animales.
Algunas fuentes afirman que el elefante salvaje se había acercado a un hombre y a su elefante cautivo, mucho más pequeño, que estaban trabajando en la plantación. Los lugareños afirman que este paquidermo salvaje en particular es conocido por haber mostrado agresividad en el pasado.
El vídeo muestra cómo un amigo del mahout, o conductor de elefantes, llama al elefante salvaje para alejarlo del elefante cautivo. El elefante salvaje persigue al hombre, que huye colina abajo. Por suerte para el hombre, el elefante resbala y cae, poniendo fin a la peligrosa persecución.
La perspectiva global
Nadie resultó herido en este encuentro, aunque el conflicto entre humanos y elefantes no es precisamente inofensivo. Según cifras del gobierno, los elefantes mataron a 800 personas entre 2006 y 2016 en un solo estado indio del noreste. Y el gobierno informa de que, de media, muere una persona al día por un ataque de tigre o elefante.
Las interacciones entre humanos y elefantes son inevitables en un país donde muchas familias dependen de pequeñas plantaciones para sobrevivir, y los elefantes se ven expulsados de su hábitat natural por la deforestación y la construcción.
Según la FAO, «el 70 por ciento de los hogares rurales de [la India] todavía dependen principalmente de la agricultura como medio de subsistencia, y un 82 por ciento de los agricultores son pequeños y marginales».
Las investigaciones sugieren que en muchas zonas donde viven elefantes asiáticos, una gran parte de su hábitat se ha visto afectada por la construcción y la fragmentación. Además, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza clasifica a los animales como especie en peligro de extinción, con un descenso demográfico de al menos un 50 por ciento a lo largo de las tres últimas generaciones.
¿Qué medidas se toman?
Los agricultores de la zona han intentado construir vallas, mantener guardas para golpear cazos durante la noche cuando un intruso entra en la granja y algunos han plantado chiles alrededor del perímetro de su plantación para irritar las papilas gustativas de los invitados no deseados.
Ninguno de estos métodos ha demostrado ser perfecto, pero esperan poder mitigar la pérdida de cultivos sin comprometer la seguridad de los animales.
En general, las tradiciones religiosas y culturales de la región promueven el respeto por la vida silvestre y muchos agricultores optan por métodos no violentos de mitigar la pérdida de cultivos. Aunque los conflictos continuarán, tanto humanos como animales se benefician de las soluciones creativas eficaces y respetuosas.