Seis ballenas francas glaciales, especie en peligro, han aparecido muertas por causas desconocidas
Se estima que solo quedan unas 500 ballenas francas glaciales en todo el mundo, lo que hace que las recientes muertes resulten alarmantes.
Seis enormes animales en peligro de extinción han aparecido muertos en cuestión de semanas y los conservacionistas están haciendo lo que pueden para averiguar por qué.
Aunque parecían sanas, una serie de ballenas francas glaciales han sido halladas muertas en el golfo de San Lorenzo en Canadá. Ahora, Departamento de Pesca y Océano de Canadá, la Marine Animal Response Society, los guardacostas canadienses y otros grupos están colaborando para averiguar por qué están muriendo estos animales.
Las ballenas francas son consideradas las especies de ballena más extrañas y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza estima que solo quedan unos 350 individuos en el Atlántico noroeste, que en otra época había albergado decenas de miles de ejemplares. El Departamento de Pesca y Océano de Canadá estima que existen unos 500 ejemplares en todo el mundo.
La primera ballena muerta, que apareció el 6 de junio, fue encontrada nadando a la deriva frente a las costas de las islas de la Magdalena, al este de Nuevo Brunswick.
Vídeo relacionado: Viendo a través de los ojos de una ballena
«Para esta especie, la muerte de un solo animal supone un duro impacto para la población», afirma Tonya Wimmer, directora de la Marine Animal Response Society. La especie nunca se recuperó del todo de las prácticas balleneras que redujeron drásticamente sus números. Están reconocidas en la Ley de especies en riesgo del gobierno canadiense, y en Estados Unidos los animales cuentan con protecciones según la Ley de protección de mamíferos marinos.
Poco más de una semana después de encontrar la primera ballena, se encontró una segunda el 19 de junio y una tercera el 20. Según Wimmer, las otras tres se encontraron entre el 20 y el 23 de junio.
«Resulta muy extraño que todas hayan muerto en este marco de tiempo en la misma zona», explica Wimmer. «Es una catástrofe».
Sigue leyendo: Las ballenas francas australes: una especie amenazada
¿La causa de la muerte?
Las aguas en torno a San Lorenzo albergan casi una docena de especies de cetáceos. Algunos, como la ballena beluga, han hecho del golfo su casa de verano permanente. Sin embargo, los animales marinos se enfrentan a varias amenazas en la transitada zona portuaria, entre ellas ser golpeadas por un barco o contraer infecciones tóxicas.
Un informe de 2013 descubrió que los contaminantes del agua, los altos niveles de ruido, el decrecimiento del número de presas y el calentamiento global han tenido un impacto negativo en la población de belugas de San Lorenzo, que comparten su hábitat con las ballenas francas. Y a diferencia de las belugas, las ballenas se alimentan de zooplancton, que también es bastante susceptible a los cambios en el clima.
Vídeo relacionado: Cuando las ballenas beluga estuvieron a punto de desaparecer
Wimmer y otras organizaciones locales están considerando traer uno de los cadáveres hasta la orilla para realizar una necropsia que determine la causa exacta de la muerte. Wimmer no pudo proporcionar una estimación de cuándo se dispondrá de los resultados de la necropsia de estas seis ballenas, pero los investigadores tienen una oportunidad muy escasa, ya que los cuerpos ya están en estado de descomposición. La causa de la muerte puede verse en ocasiones directamente, mientras que en otras es menos visible de manera inmediata.
Si los investigadores y los responsables gubernamentales identifican una causa común de la muerte, podrán establecer recomendaciones para acciones de protección, como regular las capturas pesqueras o reconducir las rutas de los barcos para intentar evitar las rutas de las ballenas.
«Ninguna organización podía hacer esto sola», añade Wimmer insistiendo en la importancia de la colaboración para salvar a la especie. «Lo que estamos haciendo ahora es intentar mantenerlas lejos de la extinción».
Sigue aprendiendo:
