EE.UU. apuesta por una cría de perros más sana y saludable
Todos los perros son buenos chicos, pero no todos son buenos para las familias. Por eso estos criadores estadounidenses se centran cada vez más en la salud y el temperamento de los perros.
Sharon Dippel abraza a un galgo jubilado que adoptó en Florida. Con menos perros disponibles en refugios y rescatados, algunos propietarios de perros pueden plantearse comprar perros a criadores responsables que den prioridad a la salud y el temperamento.
Laura Sharkey cría perros mestizos, pero no son goldendoodles, chiweenies, pomskys ni ningún otro cruce de diseño. Ni siquiera busca una constitución, tamaño o pelaje específicos. "No me preocupa su aspecto", dice de sus cachorros. "No quiero ninguna presión genética que no se centre en la salud y el temperamento".
Sharkey y Erica Pytlovany, ambas entrenadoras caninas, fundaron Bosun Dogs en 2019 después de presenciar cómo sus clientes se enfrentaban continuamente a graves problemas de comportamiento en perros adoptados. Regularmente ven a los propietarios recurrir al realojamiento o incluso a la eutanasia debido a problemas de agresión de sus mascotas.
En España, hay más de nueve millones de perros, según Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Animales de Compañía (ANFAAC), que asegura que solo en alimentación, el sector del perro facturó más de 1000 millones de euros en 2022.
"Realmente me encantaría que todas las familias que quieren un perro agradable pudieran obtener un perro agradable, y no tenemos eso ahora", dice Sharkey, quien también es propietaria de los centros de entrenamiento canino WOOFS! en Arlington, Virginia (Estados Unidos): "Decidí que la mejor forma de hacerlo era criarlos".
Sharkey forma parte de un creciente movimiento de cría funcional en los Estados Unidos que pone el foco en entornos a pequeña escala para que los perros se conviertan en mascotas amistosas y sanas, con menos atención al estatus de raza pura.
"Quiero criar perros para lo que creo que es la función más importante de un perro, especialmente en este país, que es la de animal de compañía", dice Sharkey. Sus cachorros, que se venden entre las ocho y las diez semanas de edad (la edad en que los cachorros son más monos), cuestan de media casi 2000 euros por ejemplar.
Sharkey espera ofrecer una alternativa a los cachorros de pura raza, un tercio de los cuales se crían en criaderos de gran volumen. Y aunque algunas de estas instalaciones están reguladas por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) y cumplen normas como la Canine Care Certified de la Universidad de Purdue (Estados Unidos), muchas no prestan tanta atención a la selección de perros de cría sanos ni proporcionan un enriquecimiento adecuado a los cachorros como hacen los criadores a pequeña escala, dice Sara Reusche, propietaria de Paws Abilities Dog Training en Rochester, Minnesota.
Algunos, preocupados por la salud y el bienestar de los cachorros de pura raza optan por adoptar animales de refugios como alternativa. Pero esta vía puede no ser factible para todo el mundo, sobre todo en zonas de gran demanda, como el noreste, el Atlántico medio y la costa oeste. Hace 20 años, muchos refugios estadounidenses practicaban la eutanasia para dar cabida a nuevos animales, explica Reusche.
Pero hoy en día, en algunos lugares no hay suficientes perros, añade Reusche.
"Lo que más me gustaría que la gente supiera es que cada vez es más difícil encontrar un perro en EE.UU.", dice Reusche. "Simplemente, los mensajes no se han puesto al día".
En España, casi 290 000 perros acabaron en refugios en 2022, de los cuales casi el 50% acaba volviendo a ser adoptado, según los datos de la Fundación Affinity. Entre los perros abandonados, el 72,4% son mestizos y "las 6 principales razones declaradas por las familias que entregaron a su animal de compañía a un refugio en 2022 fueron las camadas no deseadas (18.6%), el comportamiento del animal (12.3%), la pérdida del interés por el animal (11.6%), el fin de la temporada de caza (11.4%), los factores económicos (8.9%) y los cambios de vivienda (7.8%)".
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Criar perros para que sean buenas mascotas
Aparte de las razas de juguete criadas específicamente como perros falderos, muchas razas tienen antecedentes como perros de trabajo: pastoreo, guardia, caza, etcétera. Pero hoy en día, el principal objetivo de los perros, sobre todo en los países occidentales, es ser mascotas.
Sin embargo, pocas personas crían perros con este fin, según Joyce Briggs, tesorera de Functional Dog Collaborative, una organización sin ánimo de lucro con sede en New Hampshire (Estados Unidos). "El perfil del perro familiar de éxito, realmente equilibrado, no se contempla como una categoría", afirma Briggs.
Durante la pandemia, cuando se disparó el interés por los animales de compañía, mucha gente vio la oportunidad de criar perros, dice Carolyn Kelly, presidenta del Companion Dog Project, una red nacional de criadores sin ánimo de lucro. Sin embargo, estos criadores menos experimentados pueden carecer de los conocimientos necesarios para elegir cuidadosamente las parejas y socializar a los cachorros, lo que puede predisponerlos a problemas de salud y comportamiento, afirma Kelly.
De hecho, una de las principales razones por las que los estadounidenses y los españoles renuncian a sus perros son los problemas de comportamiento, que pueden suponer un reto y llevar mucho tiempo. Para tratar la ansiedad canina por separación, por ejemplo, es posible que el dueño tenga que cambiar drásticamente sus horarios para quedarse en casa con el animal mientras éste se desensibiliza gradualmente a pasar más tiempo solo.
Los criadores de razas puras por afición o conservación suelen prestar más atención a las pruebas de salud y al cuidado de los cachorros, dice Briggs; el American Kennel Club registró unos 800 000 perros de este tipo de criadores en 2021. Pero estas operaciones solo pueden ofrecer una oferta limitada; ya es habitual que estos criadores a pequeña escala tengan listas de espera de uno o dos años.
Incluso si se adoptaran los 3,1 millones de perros que entran anualmente en los refugios de EE.UU., Reusche afirma que sólo se cubriría un tercio de la demanda. Reusche calcula que, dado que hay entre 83 y 108 millones de perros en el país y que la esperanza de vida media de un perro es de algo más de 11 años, para mantener las tasas actuales de propiedad de perros se necesitan entre 7,4 y 9,6 millones de perros nuevos al año.
Bosun Dogs, que ha acogido a más de 300 perros de protectoras y refugios a lo largo de los años, también ofrece un servicio para poner en contacto a personas con perros de refugios. Sharkey se reúne con las familias que quieren adoptar para hablarles de lo que buscan en un perro y luego, previo pago, las acompaña a refugios y actos de adopción para evaluar posibles mascotas.
"Compartimos con los criadores responsables el objetivo de que la gente conozca la alegría de tener un perro como parte de su familia", afirma en un correo electrónico Pamela Reid, vicepresidenta del equipo de comportamiento de la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (ASPCA).
"Estos criadores rechazan las prácticas de los criadores comerciales, los intermediarios, las tiendas de mascotas, las subastas y otros que se lucran con la crueldad y, en su lugar, planifican la cría con cuidado, colocan a los perros con consideración y asumen una responsabilidad de por vida por los animales que han criado".
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Una colaboración de simpáticos cachorros
Para ayudar a resolver los problemas de la industria estadounidense de cachorros, la genetista canina y veterinaria Jessica Hekman fundó en 2020 la Cooperativa de Perros Funcionales. El objetivo de la organización internacional es "construir esta nueva cultura de la cría de perros, en la que hacemos las cosas de una manera algo diferente, para producir perros que son más fiablemente sanos y conductualmente adecuados" para la vida como mascotas.
El grupo privado de Facebook de la organización cuenta actualmente con casi 12 000 miembros, y aproximadamente la mitad son criadores, dice Hekman.
Es, en parte, una respuesta al deterioro de la salud de ciertas razas: por ejemplo, el Cavalier King Charles spaniel tiene casi garantizado el desarrollo de una enfermedad cardiaca a los ocho años; otras razas no pueden respirar o moverse libremente debido a su anatomía, como el siempre popular bulldog francés.
Entre el 15 y el 20 por ciento de la personalidad de un perro depende de la genética, afirma Hekman. Los criadores también pueden crear perros de familia resistentes de otras formas, por ejemplo cuidando bien de las madres, cuyo estrés puede influir en el desarrollo de sus crías, y exponiendo a los cachorros a experiencias positivas, lo que ayuda a aumentar su confianza en la edad adulta.
Los criadores de perros funcionales también están dispuestos a devolver un cachorro que no haya funcionado, así como a incluir su información de contacto en los microchips de los cachorros. Los criadores responsables, por definición, no contribuyen a aumentar la población de perros de refugio, afirma Ji Khalsa, asesor de educación de criadores del Companion Dog Project y fundador de Midwoofery, un sitio web de educación de criadores.
Evan MacLean, director del Arizona Canine Cognition Center de la Universidad de Arizona, valora los esfuerzos del movimiento de cría funcional.
Señala que no hay pruebas suficientes que demuestren un empeoramiento de los problemas de comportamiento de los perros en EE.UU. Pero dado el panorama actual de la cría, es ciertamente posible, dice.
"Podemos y debemos hacer perros que sean más propensos a ser buenas mascotas", añade.
"Muchos perros de la sociedad occidental actual son mascotas y los comportamientos que importan son, ya sabes, que no muerdan a los niños ni a otros perros y que no tengan ataques de pánico cuando el dueño sale de casa para ir al supermercado. Y no creo que hayamos criado perros con esas características".
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Un estándar de excelencia
La visión de Hekman es crear redes de criadores con objetivos y normas comunes. Un comprador de cachorros que pasara por estas redes tendría una idea clara de los procedimientos de los criadores. Y los criadores miembros podrían ayudarse mutuamente, por ejemplo compartiendo sementales y madres.
El Companion Dog Project es un ejemplo: cuenta con 25 criadores miembros, que Kelly espera aumentar. Empezó a criar a su labrador, Lucy, porque es un perro "superresistente, a prueba de bombas, que va a todas partes, que hace de todo, que quiere a todo el mundo y que, de hecho, se duerme si no estás haciendo nada ese día".
"Nuestro objetivo es establecer el estándar de excelencia en la cría de perros cuyo propósito es ser una mascota familiar".
Para alcanzar este objetivo, la red está creando un registro norteamericano, como el que se utiliza para los perros de raza pura. La base de datos, que pronto será de acceso público, permitirá buscar perros que hayan cumplido las normas de salud y temperamento y ver a sus parientes, los resultados de las pruebas de salud y, en su caso, las opiniones de los propietarios sobre los cachorros vendidos, afirma Kelly.
"Hay mucho interés por la cría de perros", afirma. "Lo que creo que necesitamos es una infraestructura, un sistema de apoyo y un modelo que diga: 'Esto se hace así'".
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.