¿Qué sabemos de la misteriosa enfermedad respiratoria que se está extendiendo entre los perros de EE. UU.?
La comunidad científica avanza en la determinación de la causa de esta enfermedad que se ha detectado en más de una docena de estados. Esto es lo que sabemos hasta ahora sobre la enfermedad y cómo proteger a tu mascota.
El brote de la misteriosa enfermedad respiratoria se ha extendido a perros de todo Estados Unidos.
Cuando empezaron a llegar informes sobre un brote de enfermedad respiratoria en perros de New Hampshire (Estados Unidos), en el verano de 2022, David Needle y sus colegas empezaron a investigar inmediatamente.
En aquel momento, el laboratorio de investigación veterinaria de Needle era la única instalación del norte de Nueva Inglaterra con patólogos en plantilla, así que se desplazó a varias clínicas cercanas para obtener muestras de tejido de los perros infectados. Pero después de buscar los sospechosos habituales, no encontró nada.
"No encontramos virus de ARN o ADN conocidos. Ni hongos, bacterias, protozoos o metazoos. Nada estrechamente relacionado con un patógeno conocido", dice Needle, patólogo veterinario senior del Laboratorio de Diagnóstico Veterinario de New Hampshire y profesor de la Universidad de New Hampshire. Los frotis también dieron negativo para COVID-19, que ya se ha detectado en perros.
Esto significaba que lo que estaba causando el brote era probablemente nuevo. En el plazo de un año, más de una docena de estados de EE. UU., desde California a Florida, detectaron enfermedades similares en sus perros.
"Confiamos en nuestros colegas, así que lo perseguimos", dice Needle. Como parte del esfuerzo por identificar la causa, el estudiante de postgrado Lawrence Gordon, del Centro Hubbard de Estudios Genómicos de la Universidad de New Hampshire, empezó a profundizar en los datos.
Su análisis reveló un pequeño segmento de ADN que aparecía en 21 de las 30 muestras tomadas de perros sintomáticos en New Hampshire, una proporción "bastante significativa", según Needle. Curiosamente, el ADN parece pertenecer a una bacteria no descrita anteriormente, que está estrechamente relacionada con "unas extrañas bacterias que tiene un genoma muy pequeño", llamada Mycoplasma, dice.
En 2023, el equipo amplió sus pruebas para incluir muestras de perros de Massachusetts y Rhode Island, en esta última también apareció la misma bacteria desconocida. A finales de noviembre, el equipo también está evaluando muestras de Oregón, Colorado e Illinois.
"Estamos a unas tres, cuatro, cinco o seis semanas de saber mucho más", dice Needle.
Aunque se está trabajando para saber más sobre esta misteriosa bacteria, nadie puede afirmar que sea la culpable, advierte Needle. Puede que la bacteria simplemente crezca en cantidades notables porque los animales están debilitados por algún otro patógeno, como un virus.
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¿Una versión canina del resfriado común?
La nueva enfermedad, que suele provocar tos, estornudos y ojos llorosos, dura más que otras afecciones de las vías respiratorias altas en perros, que suelen desaparecer en unos 10 días. También es resistente a la mayoría de los tratamientos, como los antiinflamatorios. La buena noticia es que la mayoría de los casos no son mortales, y el patógeno no parece transmitirse a las personas.
"No queremos que cunda el pánico", afirma Brian Collins, veterinario del Cornell Richard P. Riney Canine Health Center de Nueva York, un centro de investigación que también ha analizado muestras de perros sintomáticos. "Los brotes de enfermedades respiratorias no son inusuales en las poblaciones caninas".
Tampoco está claro si todos los casos de enfermedad respiratoria atípica encontrados en todo el país están relacionados. De hecho, Needle cree poco probable que una sola bacteria esté causando todo esto. Más bien apuesta por que se trate de un síndrome.
"Un síndrome no es más que un grupo de enfermedades que presentan signos clínicos similares", afirma.
Por ejemplo, el resfriado común en las personas consiste en realidad en numerosas especies de virus o bacterias que circulan durante varias estaciones.
"Si lo que estamos viendo es un nuevo patógeno, probablemente hemos encontrado un nuevo miembro del complejo de enfermedades respiratorias superiores caninas", dice Needle.
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Cómo proteger a tu perro
Si vives en Estados Unidos, hay varias precauciones que puedes tomar para proteger a tu perro. En primer lugar, averigüa si hay un brote en tu zona, lo que puede significar sintonizar las noticias locales o ponerse en contacto con tu veterinario. Tanto la Universidad de New Hampshire como la de Cornell ofrecen información actualizada sobre la enfermedad en sus sitios web.
En general, "el mayor riesgo lo corren los perros que se relacionan con otros perros", dice Collins. Los dueños de perros que van a parques, perreras, guarderías, peluquerías y otros lugares sociales "probablemente sí necesitan tener un poco más de conciencia y preocupación."
En general, Collins afirma que los perros más jóvenes, los de más edad y los que padecen otras enfermedades crónicas, como cardiopatías, también pueden correr un riesgo mayor.
En última instancia, la mejor estrategia para proteger a tus mascotas es mantenerlas al día en sus vacunas.
"Si los perros están completamente vacunados según las recomendaciones de tu veterinario, tienen más posibilidades de recuperarse o de padecer enfermedades menos graves", dice Collins.
Vacunas, distanciamiento social, preocupación por enfermedades preexistentes... si todo esto empieza a sonar muy parecido a los consejos para limitar la propagación de la COVID-19 en humanos, no te equivocas.
"Todos hemos pasado por esto por nosotros", dice Needle: "Ahora sólo tenemos que hacer lo mismo por los perros".
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.