Estos son los mayores retos sanitarios a los que se enfrentarán las mujeres a lo largo de su vida

En España, una mujer muere cada ocho minutos debido a una enfermedad cardiovascular. Es fácil dar por sentado el latido de nuestros corazones, pero ninguna otra amenaza para la salud de las mujeres es mayor que el riesgo cardiovascular.

Pero a pesar de todo el peligro que supone para las mujeres a lo largo de su vida, la enfermedad cardiovascular es también una de las afecciones más sencillas ante la que tomar medidas para reducir sus riesgos. La clave está en reconocer los hábitos de vida que pueden disminuir ese riesgo e incorporarlos a tu vida lo antes posible.

"Sabemos que una dieta sana y el ejercicio tienen que ser los pilares de la salud cardiaca", dice Kathryn Lindley, cardióloga del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt en Estados Unidos. Y luego están los hábitos que hay que evitar (fumar,vapear, e ingerir alcohol en exceso) para gozar de la mejor salud cardiaca y general.

El cáncer va camino de convertirse (si no lo es ya) en la mayor causa de muerte de mujeres en España. Aunque no es posible detectar todos los tipos de cáncer, existen pruebas de detección para los tres tipos responsables de la mayoría de las muertes por cáncer femenino: cáncer de mama, de pulmón y colorrectal.

La buena noticia es que no fumar, seguir una dieta sana y hacer ejercicio con regularidad también reducen el riesgo de casi todos los tipos de cáncer. Y estos mismos hábitos de vida también reducen la probabilidad de desarrollar trastornos metabólicos, como la obesidad y la diabetes de tipo 2, otras dos enfermedades que perjudican cada vez más a las mujeres estadounidenses.

En las cinco historias que hemos cubierto como parte de esta serie sobre la salud de la mujer, hemos preguntado a los expertos cuáles son los grandes temas en los que deben centrarse las mujeres en cada década.

Los 20, la década de las oportunidades para la salud del futuro

La veintena de una mujer es su oportunidad para construir una base sólida para la salud en décadas futuras. Eso significa establecer hábitos saludables, conocer los antecedentes médicos familiares y encontrar un médico de atención primaria "de confianza que sepa que todas las partes del cuerpo están conectadas", dice Stacey Rosen, cardióloga de Northwell Health en Estados Unidos. Ese profesional puede ser un médico de familia, un internista, un ginecólogo u obstetra, pero lo más importante es la relación que establezcas con él.

Aunque la mayoría de las pruebas de detección del cáncer comienzan en la mediana edad de la mujer, la prevención de un tipo concreto de cáncer empieza a los 20 años. La única razón por la que el cáncer de cuello de útero ya no es una de las principales causas de muerte entre las mujeres es la combinación de las pruebas de detección del cáncer de cuello de útero, que comienzan a los 21 años, y la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), que previene no sólo el cáncer de cuello de útero, sino también los cánceres vulvar, vaginal, oral y anal. Las tasas de cáncer de cuello de útero y cáncer oral en países como Estados Unidos han ido en aumento en las mujeres de mediana edad, pero la vacuna contra el VPH, recomendada hasta los 26 años y disponible hasta los 40, puede invertir esta tendencia en los próximos años. Esa menor incidencia ya se hace notar en España, donde hay "tasa de incidencia muy baja a nivel mundial, con un descenso muy importante desde los años 60, aunque actualmente está estabilizada", según la Asociación Española Contra el Cáncer.

¿De qué otra forma puedes construir una base sólida para tu salud a los 20 años? Lee el artículo completo aquí.

Los 30 y la importancia de la planificación

Cada vez más mujeres esperan hasta la treintena para formar una familia. Si estás planeando un embarazo, empieza por hablar con tu ginecólogo antes de quedarte embarazada "para saber qué necesitas para potenciar al máximo tu salud antes de quedarte embarazada", dice Jill Rabin, ginecóloga de Northwell Health en Estados Unidos. Y si el embarazo no entra en tus planes, "entonces tienes que utilizar métodos anticonceptivos si mantienes relaciones heterosexuales", dice.

Durante el embarazo, ten en cuenta que la salud cardiaca y la salud reproductiva de la mujer están íntimamente ligadas.

"Lo importante es darse cuenta de que los momentos reproductivos realmente importantes de nuestra vida, con el embarazo y la menopausia, están realmente interrelacionados con nuestra salud cardiovascular a largo plazo", afirma Lindley. Algunas de las complicaciones más comunes del embarazo, como la preeclampsia, la diabetes gestacional y el parto prematuro, aumentan el riesgo de padecer cardiopatías y accidentes cerebrovasculares más adelante en la vida.

"Recuerda que estos factores de riesgo son una oportunidad para identificar y tratar el riesgo cardiovascular a largo plazo y mantener a las personas en el camino de la salud cardiaca a largo plazo", dice.

Pero esas no son las únicas complicaciones a las que te enfrentas a los 30. Lee aquí la historia completa.

(Relacionado: Como afecta el embarazo a nuestra edad biológica)

Los 40, hora de evaluar y mejorar la salud

Cuando las mujeres entran en la cuarentena, su riesgo de cáncer y enfermedades cardiovasculares empieza a aumentar. "Ahora es el momento de evaluar tu salud actual y buscar formas de mejorarla antes de entrar en la menopausia, cuando resulta más difícil perder peso y dormir lo suficiente", dice Rosen; "es un momento importante para optimizar la tensión arterial, el colesterol, el peso y la actividad física", afirma.

También es un momento importante para empezar las pruebas de detección del cáncer de mama y de colon. Si tienes antecedentes familiares de estos tipos de cáncer, es probable que hayas empezado a someterte a revisiones en una década anterior. Pero la mayoría de las mujeres deberían hacerse su primera mamografía a los 40 años y seguir haciéndoselas cada dos años a partir de entonces.

Las pruebas de detección del cáncer de colon comienzan a los 45 años y, aunque las mujeres tienen múltiples opciones para someterse a ellas, el estándar de oro para la prevención es la colonoscopia, dice Rajeev Jain, gastroenterólogo de Texas Digestive Consultants en Estados Unidos. "Probablemente el 90 por ciento de las muertes por cáncer colorrectal son evitables si hubiéramos podido detectarlas a tiempo y realizar una colonoscopia de alta calidad", afirma.

¿Y qué pasa con los problemas de tiroides y los cambios en la piel? Lee la historia completa aquí.

Los 50, la década de la menopausia

La quinta década de la vida de las mujeres suele estar dominada por una palabra: menopausia.

La menopausia, que comienza, de media, a los 51 años, se produce cuando la mujer ha dejado de tener la menstruación durante al menos un año. La menopausia y la perimenopausia (el periodo de tiempo que transcurre entre el inicio de los síntomas y el cese de la menstruación) implican cambios en casi todos los sistemas del organismo femenino.

"El viaje de cada persona será un poco diferente", dice Asima Ahmad, especialista en endocrinología reproductiva y fertilidad y directora médica de Carrot Fertility, pero entre los cambios que pueden experimentar las mujeres están las dificultades para dormir, los sofocos, los sudores nocturnos, la fatiga, la ralentización del metabolismo, los cambios de humor, la sequedad vaginal, el aumento de peso, los dolores de cabeza, los cambios en el deseo sexual y los problemas de concentración.

Dos de estos síntomas (los sofocos y los sudores nocturnos)pueden ser indicadores de la otra gran amenaza para la salud de las mujeres de 40 años: las enfermedades cardiacas. Las mujeres menores de 60 años que presentan un mayor número e intensidad de sofocos y sudores nocturnos, también tienen un mayor riesgo de sufrir un infarto de miocardio o un ictus.

Pero la buena noticia es que se puede hacer algo al respecto. Lee la historia completa aquí.

Los 60, poniendo la salud cardiaca en el centro

Siguiendo la tendencia de décadas anteriores, la salud cardiaca debe ser el centro de atención de las mujeres a partir de los 60 años. Una dieta sana, la actividad aeróbica y los ejercicios de fortalecimiento muscular (que también protegen los huesos cuando empiezan a debilitarse) siguen siendo la piedra angular para proteger el corazón y el cerebro. Pero también es importante reconocer un infarto si se produce.

"Las mujeres suelen tener dificultad para respirar, dolor torácico, dolor de espalda y una fatiga fácil de descartar", dice Rosen. "Tienes ese sentido arácnido. Si algo no está bien, haz que te lo miren porque se convierte en un momento peligroso para las mujeres", añade.

Otra parte importante del cuerpo que merece atención es la pelvis. Tal vez hayas oído que debes "hacer tus Kegels", pero muchas mujeres no comprenden del todo lo importante que es mantener la fuerza de su suelo pélvico. Los músculos del suelo pélvico sostienen la vejiga, el útero y los intestinos y tensan los orificios vaginal, uretral y anal. Con la edad, y sobre todo si se han tenido embarazos, estos músculos pueden debilitarse gradualmente, aumentando el riesgo de prolapso de órganos pélvicos e incontinencia. El riesgo es aún mayor después de la menopausia, con la pérdida de estrógenos.

El prolapso de órganos pélvicos, en el que uno o varios órganos pélvicos sobresalen de la vagina, se produce en hasta la mitad de las mujeres en algún momento, y la incontinencia urinaria asociada a un suelo pélvico debilitado es la principal causa de ingreso de las mujeres en residencias de ancianos, afirma Rabin. Pero se pueden hacer ejercicios para fortalecer estos músculos.

"Recomiendo a la gente que maximice la fuerza de su suelo pélvico cada década y así, si lo mantienen lo más fuerte posible, tendrán menos probabilidades de sufrir prolapsos e incontinencia", dice Rabin.

Los 60 también tienen importantes implicaciones para el sistema inmunitario. Lee la historia completa aquí.

Si todas estas recomendaciones te parecen demasiadas, céntrate en una cada vez. Nadie puede cambiar de hábitos de la noche a la mañana, pero cada cambio positivo es un paso hacia una vida más sana.