Groenlandia no está en venta
Las autoridades groenlandesas han reaccionado ante la noticia de que el presidente estadounidense quiere comprar la mayor isla del mundo.
Groenlandia, el territorio danés semiautónomo y cubierto de hielo a caballo entre el Atlántico Norte y el océano Glacial Ártico, no está en venta. Al menos ese es el mensaje que transmitió recientemente el Ministerio de Asuntos Exteriores de Groenlandia en un tuit, que tenía la doble finalidad de describir las riquezas naturales de la mayor isla del mundo.
«En #Groenlandia abundan recursos valiosos, como minerales, el hielo y el agua más puros, poblaciones de peces, marisco, energía renovable y es una nueva frontera para el turismo de aventura», reza el tuit del Ministerio.
El mensaje es una respuesta a las noticias de que el presidente Donald Trump ha planteado la idea de comprar esta isla de más de dos millones de kilómetros cuadrados en algunas reuniones y a sus asesores. No sería la primera vez que surge este interés: al parecer, las autoridades estadounidenses intentaron comprar la isla en 1946 poco después de la Segunda Guerra Mundial y justo cuando comenzaba la Guerra Fría con la URSS.
Su ubicación estratégica en un Ártico cada vez más disputado, Groenlandia no está a la venta. El tuit del Ministerio de Asuntos Exteriores acababa con varios emojis que representaban un copo de nieve, una montaña cubierta de nieve, una ballena expulsando agua, una langosta, la bandera blanca y roja de Groenlandia y un mensaje claro:
«Estamos abiertos a los negocios, pero no estamos en venta».
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.