Tarro de vaselina

¿Qué es el 'slugging'? ¿Merece la pena? Te contamos todo lo que debes saber de la última moda para la piel

Esta técnica de hidratación para la piel existe desde hace milenios y se practica en todo el mundo, ya que, según los expertos, es una forma generalmente bien tolerada de retener la humedad.

La vaselina es un producto muy utilizado para el slugging, aunque hay muchas alternativas, como los productos que utilizan lanolina o incluso manteca vegetal.

Fotografía de Rebecca Hale, Nat Geo Image Collection
Por Liz Langley
Publicado 12 ago 2024, 12:56 CEST

¿Qué es exactamente el slugging? En pocas palabras, esta tendencia de cuidado de la piel (muy de moda últimamente, aunque existe desde hace milenios en regiones de todo el mundo) consiste en la aplicación de lo que se denomina un "oclusivo", un producto que actúa como sello o barrera física, como la vaselina. Esto ayuda a "atrapar la humedad y rellenar la piel", según afirma la dermatóloga de Seattle Heather Rogers, miembro de la Academia Americana de Dermatología.

En realidad, el slugging (una palabra que podríamos traducir como "babeo") no tiene nada que ver con el molusco que le da nombre (slug en inglés es "babosa"): se llama así porque la práctica deja la piel brillante, como la piel de una babosa o su rastro.

Esta práctica no es nueva para las mujeres negras estadounidenses, que usan vaselina para "engrasarse" desde hace décadas y desde antes incluso de que existieran productos creados específicamente para su piel. El aceite como bálsamo se remonta a los antiguos egipcios, que se interesaron por esta técnica para reducir arrugas, según el papiro Ebers del año 1550 a.C. En la Norteamérica del siglo XV, la tribu seneca utilizaba el aceite que se filtraba del suelo en el noroeste de Pensilvania para ablandar las pieles de los animales, además de la suya propia.

¿Por qué hace slugging? Aunque las personas con piel seca, sobre todo las que padecen eccema, pueden beneficiarse más del slugging, cualquiera puede aprovechar la hidratación extra que éste proporciona. Los limpiadores a base de sulfatos o astringentes pueden resecar la piel durante la noche, sobre todo si se omite la hidratación, dice el cirujano dermatológico Anthony Rossi, fundador de Rossi DERM MD. Los cambios estacionales también pueden resecar la piel, añade Kyle Cullingham, dermatólogo y profesor adjunto de dermatología de la Universidad Saskatchewan (Canadá).

Hoy en día, la vaselina es una opción muy popular para hidratar la piel, dice Jenn Harper, fundadora de Cheekbone Beauty. Según esta experta, basta con aplicársela en la cara antes de acostarse para retener la humedad y favorecer la cicatrización.

Comienza con tu rutina personal, que variará en función de tu tipo de piel y tus necesidades, pero que puede incluir desmaquillado, limpieza y aplicación de tónico, tratamiento para el acné u otros tratamientos. Rogers recomienda humedecer un poco la cara antes de aplicar la crema hidratante para sellar "todo lo bueno".

No hay reglas estrictas sobre qué crema hidratante usar bajo el oclusivo, dice Cullingham, pero "muchas personas consideran que las cremas hidratantes que contienen ceramidas, ácido hialurónico o sueros de vitamina C son útiles para el slugging."  Entre los ingredientes a evitar, dice, están los "retinoides, bakuchiol, hidroxiácidos alfa y beta como el ácido glicólico y ácido salicílico" que "tienen más potencial de irritación."

Ahora la parte divertida: aplicar el oclusivo. Puedes hacerlo inmediatamente, dice Rogers, o esperar de 10 a 15 minutos para que tu piel absorba la crema hidratante, dice Cullingham. El oclusivo que utilices "depende de tus preferencias personales y de la sensibilidad de tu piel", dice Rogers.

Los oclusivos que contienen vaselina suelen tolerarse bien y son baratos. Otras opciones incluyen productos como Aquaphor, que utiliza un derivado de la lanolina, o incluso manteca vegetal, dice la dermatóloga Margaret Lee. Además, advierte de que las personas alérgicas deben comprobar los ingredientes antes de utilizar cualquier producto.

Tradicionalmente, el oclusivo se deja toda la noche, dice Rogers. Si prefieres quitártelo para no dañar las almohadas, Cullingham recomienda "al menos de 30 a 60 minutos para obtener los mejores resultados".

Por último, cuando hayas terminado con el proceso, puede que no sea necesario limpiarte, pero "si por la mañana todavía tienes la cara pegajosa, lávate con un limpiador suave y agua tibia", dice Rogers; "si te lo quitas con métodos agresivos puedes deshacer todo el buen trabajo que tu piel acaba de hacer mientras dormías".

Si tienes la piel irritada, sáltate tu rutina habitual, sobre todo si ésta contiene retinol, tretinoína o vitamina C, dice Rogers.  Debes seguir lavándote con un limpiador suave y una crema hidratante, pero eso es todo. "No hay que pedirle a la piel que haga más cuando está irritada", dice.

Leer las etiquetas y hacer pruebas con ingredientes de los que no estés segura puede ahorrarte muchos disgustos. Algunos oclusivos contienen ingredientes como la lanolina, que no supone un problema para la piel sana pero, según Rogers, tiene muchas probabilidades de provocar una reacción alérgica en la piel inflamada o lesionada.

Una prueba de parche bastará para determinar si el oclusivo irritará la piel. Aplícate un poco en el antebrazo o en la cara y comprueba si la piel se irrita al día siguiente, dice Rogers. Ten en cuenta que la piel de la cara puede ser más sensible.

Ni que decir tiene que el slugging no es para todo el mundo. "He visto a mucha gente con acné comedoniano u mascné", posiblemente causado por el slugging, dice Rossi, porque esa barrera oclusiva está "obstruyendo sus folículos pilosos y poros y causando granos".

Si experimentas estos problemas, dice, "debes parar el slugging y permitir que la piel se mejore".

Rossi no recomienda el slugging a sus pacientes a menos que tengan la piel extremadamente seca o agrietada. Para la hidratación diaria "es demasiado", afirma, convencida de que las cremas hidratantes habituales deberían bastar.

El slugging no tiene mucha relación con las babosas, a pesar de que en los últimos años sus primos los caracoles se han hecho populares en el mundo del cuidado de la piel.

Los productos para el cuidado de la piel que contienen mucina de caracol (su moco) no forman una barrera, por lo que no son ideales para hacer slugging, pero tienen otros beneficios. La mucina contiene "enzimas que favorecen la renovación celular" y ácido hialurónico, un elemento natural de nuestro cuerpo que ayuda a hidratar la piel reteniendo el agua, explica Rogers.

La mucina también tiene "propiedades antibacterianas, por eso es buena para el acné", añade Cullingham.  Por desgracia, la recolección de mucina de caracol plantea problemas éticos, ya que sólo se excreta cuando el animal está estresado.

Es posible que no sea necesario recalcarlo, pero no debes usar babosas para hacer slugging, y olvídate de agarrar un caracol en busca de su mucina, ya que, como avisa Rogers: "¡Nunca sabes dónde ha estado ese caracol!".

Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.

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