¿Qué fue la Guerra Fría?
Aunque Estados Unidos y la Unión Soviética estaban técnicamente en paz durante la Guerra Fría, el periodo estuvo marcado por una alta tensión mientras ambos países competían por aumentar su arsenal nuclear. Para muchos estadounidenses, incluidos estos escolares y su profesora que se refugiaban bajo una mesa en un colegio de Nueva Jersey, los simulacros de ataques aéreos pasaron a formar parte de su día a día.
Este artículo se publicó el 9 de marzo de 2022 y ha sido modificado el 21 de mayo de 2024.
Cuando la Segunda Guerra Mundial llegaba a su fin en 1945, los líderes de las "tres grandes" potencias aliadas (Estados Unidos, la Unión Soviética y Gran Bretaña) se reunieron en Potsdam, Alemania, para acordar las condiciones que pondrían fin al conflicto más sangriento que el mundo haya visto jamás. Las grandes potencias dividieron Alemania en zonas de ocupación, reconocieron un gobierno respaldado por los soviéticos en Polonia y dividieron Vietnam, decisiones monumentales que dieron forma al orden mundial de la posguerra. Las conversaciones debían forjar una paz duradera, pero en 18 meses comenzó una Guerra Fría que duró más de cuatro décadas.
Uno de los momentos más importantes de Potsdam no se recogió en un memorándum ni se proclamó en una rueda de prensa. Al final de la conferencia, el presidente estadounidense Harry Truman se llevó a un lado al primer ministro soviético Joseph Stalin para compartir con él algunas noticias explosivas: Estados Unidos acababa de probar con éxito un arma de "fuerza destructiva inusual". Se trataba de un arma nuclear capaz de destruir ciudades enteras, el armamento más peligroso y poderoso que el mundo había visto jamás.
En pocas semanas, Estados Unidos utilizó la bomba atómica, fruto del Proyecto Manhattan que lideró J. Robert Oppenheimer, para forzar la rendición de Japón. Con un arma devastadora y probada en su arsenal, Estados Unidos tenía de repente la ventaja entre las potencias aliadas en la guerra.
Por su parte, Stalin ya había dado luz verde a un programa nuclear en 1943, y un año y medio después de los bombardeos en Japón, la Unión Soviética logró su primera reacción nuclear en cadena. En 1949, la U.R.S.S. probó el "First Lightening", su primer dispositivo nuclear. Lo que siguió fue una peligrosa lucha por la supremacía entre dos superpotencias, Estados Unidos y la URSS, que duró hasta el colapso de la Unión Soviética en 1991.
Un camión de fabricación estadounidense descargado en el puerto de El Pireo, Grecia. En su intento de contener la influencia de la Unión Soviética en el mundo, en 1947 Estados Unidos prometió apoyar al Gobierno monárquico de Grecia en su guerra civil contra fuerzas procomunistas.
Aunque las dos naciones estaban técnicamente en paz, el periodo se caracterizó por una agresiva y costosa carrera armamentística; por sangrientas guerras por delegación libradas en América Latina, África y Asia; y por la competencia por el dominio del mundo entre los gobiernos capitalistas liderados por Estados Unidos y el bloque comunista liderado por la Unión Soviética.
La Guerra Fría duró casi medio siglo. He aquí un vistazo a por qué empezó, cómo se intensificó, su legado actual y por qué algunos analistas piensan que ya está en marcha otra Guerra Fría.
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¿Por qué se le llama Guerra Fría?
El término "guerra fría" existía desde la década de 1930, cuando la guerre froide se utilizaba en Francia para describir las relaciones cada vez más tensas entre los países europeos. En 1945, poco después de que Estados Unidos lanzara la bomba atómica sobre Hiroshima y Nagasaki, el escritor británico George Orwell utilizó el término en un ensayo que exploraba lo que la bomba atómica significaba para las relaciones internacionales.
Las bombas atómicas mataron a más de 100 000 ciudadanos japoneses, desvelando un poder destructivo tan aterrador que Orwell predijo que desalentaría la guerra abierta entre las grandes potencias, creando en su lugar "un estado que era a la vez inconquistable y en un estado permanente de 'guerra fría' con sus vecinos".
La predicción de Orwell de una "paz que no es paz" se hizo realidad al crecer la semilla de la desconfianza entre los antiguos aliados.
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¿Cómo empezó la Guerra Fría?
La URSS había soportado el mayor número de bajas militares y civiles de la guerra (unos 24 millones) mientras liberaba enormes franjas de Europa del Este del control nazi. El líder soviético Josef Stalin no estaba satisfecho con la división de Europa en la posguerra, que consideraba que no reflejaba de forma justa la contribución de su nación.
En Estados Unidos, el diplomático George Kennan expuso la creciente desconfianza de la Unión Soviética en el "Telegrama Largo" de 1946, como se conoce ahora. Kennan advirtió que la URSS era ilógica e insegura y que no cooperaría con Occidente a largo plazo. En respuesta, Washington comenzó a aplicar una política de "contención" para evitar la propagación de la ideología y la influencia soviéticas.
En la parte posterior de una fotografía de la Conferencia de Postdam en 1945, el presidente de Estados Unidos, Harry S. Truman, recuerda la conversación que tuvo con el premier soviético Joseph Stalin que suele considerarse el inicio de la Guerra Fría. En su nota se puede leer: "En la que le digo a Stalin que esperamos lanzar el explosivo más potente jamás creado sobre los japoneses. Me sonrío y dijo que agradecía que se lo dijera -pero no sabía de qué estaba hablando- ¡la Bomba Atómica!".
Joseph Stalin, líder de la Unión Soviética, Harry S. Truman, presidente de Estados Unidos, y Clement Attlee, Premier británico, asisten a la Conferencia de Postdam en 1945. Como líderes del Big Three (Los Tres Grandes) - los países que lideraron las fuerzas Aliadas a la victoria en la Segunda Guerra Mundial- se reunieron para discutir y dar forma al mundo de postguerra.
Estados Unidos no tardó en tener la oportunidad de poner en práctica su nueva política. En 1947, Gran Bretaña anunció que retiraría la ayuda a Grecia y Turquía, que estaban luchando contra los levantamientos comunistas. El presidente Harry Truman aprovechó la ocasión para pedir al Congreso fondos para ayudar a ambos países, estableciendo lo que se conoció como la Doctrina Truman: el principio de que Estados Unidos debía apoyar a los países o pueblos amenazados por las fuerzas soviéticas o la insurrección comunista. Stalin vio la medida como el disparo inicial de una guerra en la sombra.
El término "Guerra Fría" se convirtió en una abreviatura para describir la lucha ideológica entre el capitalismo en Occidente y el comunismo en Oriente. El periodista estadounidense Walter Lippmann popularizó el término en una serie de artículos en 1947, mientras las naciones elegían un bando en el enfrentamiento.
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¿Por qué se creó la OTAN?
Estados Unidos no era el único que se preocupaba por la presión de Stalin para extender la influencia soviética hacia el oeste y someter a otros estados al dominio comunista. En 1948, la URSS apoyó un golpe de estado comunista en Checoslovaquia y lanzó un bloqueo de Berlín occidental, que había sido dividido en zonas de ocupación controladas por los comunistas en el este y los capitalistas en el oeste.
Para demostrar un frente unido, Estados Unidos y sus aliados formaron una alianza transatlántica de defensa mutua conocida como la Organización del Tratado del Atlántico Norte, o OTAN. El 4 de abril de 1949, Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Portugal y el Reino Unido firmaron un tratado en el que se acordaba que "un ataque armado contra uno o varios... se considerará un ataque contra todos ellos".
Una delegación soviética llega a Polonia en mayo de 1955 para asistir a una reunión que se culminará con en el Pacto de Varsovia, un acuerdo de mutua defensa entre ocho países comunistas del Europa Oriental que pretendía servir de contrapeso para la OTAN en Occidente.
La URSS respondió creando su propia alianza defensiva. Firmado en 1955, el Pacto de Varsovia incluía a la Unión Soviética y a siete estados satélites, entre ellos Polonia y Alemania Oriental, reforzando la barrera ideológica y militar entre Europa Oriental y Occidental que Winston Churchill había bautizado como "Telón de Acero" en un discurso de 1946.
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¿Cómo de cerca estuvo el mundo de la guerra nuclear?
Mientras los dos bandos se enfrentaban al otro lado del Telón de Acero, Estados Unidos y la URSS se enzarzaron en una carrera armamentística, invirtiendo billones de dólares en acumular arsenales nucleares.
Estados Unidos tenía ventaja al principio de la carrera armamentística. Pero una vez que la URSS construyó su propio arsenal nuclear, las dos partes se enfrentaron por la "destrucción mutua asegurada", es decir, la idea de que si una de las partes atacaba, la otra tomaría represalias, desatando consecuencias apocalípticas para ambas partes.
Ambos países tenían defensas antimisiles apuntando el uno al otro, y en 1962, la Crisis de los Misiles de Cuba acercó a los países al borde del abismo más que cualquier otro evento de la Guerra Fría. Estados Unidos detectó bases de misiles y armas soviéticas en la Cuba comunista, a sólo 90 millas al sur de Florida. Exigiendo su retirada, el presidente John F. Kennedy declaró que un ataque en territorio estadounidense desencadenaría un ataque nuclear inmediato contra la URSS.
El presidente John F. Kennedy, en la televisión de unos grandes almacenes en 1962, anuncia el bloqueo de Cuba durante la crisis de los misiles cubanos, un momento decisivo en la Guerra Fría.
La amenaza de una guerra nuclear inminente se cernió sobre casi dos semanas de tensas negociaciones. Finalmente, la URSS aceptó desmantelar sus instalaciones armamentísticas si Estados Unidos se comprometía a no invadir Cuba, algo que ya había intentado de manera encubierta un año antes. Entre bastidores, Estados Unidos aceptó retirar las armas nucleares de Turquía; ese acuerdo no se hizo público hasta 1987.
Sin embargo, los arsenales nucleares de ambas partes siguieron creciendo exponencialmente. A finales de la década de 1980, se calcula que Estados Unidos tenía 23 000 armas nucleares frente a las 39 000 de la Unión Soviética.
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¿De qué otra forma se libró la Guerra Fría?
Durante más de cuatro décadas de Guerra Fría, Estados Unidos y la Unión Soviética libraron múltiples guerras por delegación en todo el mundo. En la Guerra de Corea, la Guerra de Vietnam y otros conflictos armados, las superpotencias financiaron bandos opuestos o lucharon directamente contra milicias comunistas o capitalistas. Ambos bandos financiaron revoluciones, insurgencias y asesinatos políticos en América Latina, África, Asia y Oriente Medio.
Estados Unidos y la Unión Soviética también compitieron para demostrar su dominio tecnológico en una carrera espacial que duró 20 años. La Unión Soviética fue la primera en lanzar en 1957 el Sputnik-1, el primer satélite artificial, mientras que Estados Unidos fue el primero en enviar un hombre a la luna en 1969. Sólo a mediados de la década de 1970 las dos naciones comenzaron a cooperar en misiones conjuntas.
Pero la confrontación este-oeste fue más allá de la política. Afectó al deporte, siendo los episodios más famosos los boicots en los Juegos Olímpicos, primero de Estados Unidos en Juegos Olímpicos de Moscú 80 y, cuatro años más tarde, de la URSS a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 84.
También se vio afectada la cultura, donde destacan las controversias surgidas a raíz del Festival de Eurovisión. El festival anual lo organizaban los países de Europa Occidental y no invitaban a los representantes del otro lado del Telón de Acero, aunque sí que participaban países con regímenes dictatoriales como España.
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A partir de la década de 1950, Estados Unidos y la URSS se adentraron en la Carrera Espacial, añadiendo otro escenario a la competición de la Guerra Fría por ser el más preparado militarmente. A la izquierda, un astronauta prepara un experimento en la Luna. A la derecha, el Sputnik de la Unión Soviética, el primer satélite.
Un astronauta prepara un experimento en la Luna.
¿Cómo terminó la Guerra Fría?
A mediados de la década de 1980, la vida detrás del Telón de Acero había cambiado. En los países del bloque soviético se estaban produciendo levantamientos democráticos, y la propia URSS luchaba contra el caos económico y político. Estados Unidos y la URSS forjaron una relación más abierta, e incluso negociaron un tratado nuclear en 1987 que eliminó una clase de misiles lanzados desde tierra especialmente peligrosos de los arsenales de ambas naciones.
En 1991, la Unión Soviética había perdido la mayor parte de su bloque a causa de las revoluciones democráticas, y el Pacto de Varsovia se disolvió formalmente. Mijail Gorbachov, el último líder de la URSS, abrió su país a Occidente e instituyó reformas económicas que socavaron las instituciones que dependían de los bienes nacionalizados. En diciembre de 1991, la URSS se disolvió en naciones separadas.
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¿Qué significa todo esto ahora?
La U.R.S.S. ha desaparecido y los arsenales nucleares han disminuido drásticamente gracias a los tratados de no proliferación suscritos por Washington y Moscú en las décadas de 1980 y 1990. En las últimas décadas, Estados Unidos y Rusia han cooperado en una serie de cuestiones globales, como Afganistán y la guerra contra el terrorismo.
Pero la Guerra Fría sigue afectando a la geopolítica moderna. Ambas naciones siguen teniendo intereses geopolíticos divergentes, grandes presupuestos de defensa y bases militares internacionales. La OTAN sigue teniendo poder político y ha crecido hasta incluir a 30 Estados miembros. La alianza se extiende ahora hasta las fronteras de Rusia e incluye a antiguos Estados soviéticos y miembros del Pacto de Varsovia, como Polonia y los Estados bálticos. Desde la década de 1990, Rusia ha visto la expansión de la OTAN hacia el este como una amenaza para su seguridad.
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Las tensiones entre Rusia y Occidente alcanzaron un nuevo punto álgido tras la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022, que había solicitado dar los primeros pasos hacia la adhesión a la OTAN en 2008, antes de que un nuevo presidente archivara el plan dos años después. Algunos comentaristas han comparado la crisis actual con el inicio de una nueva Guerra Fría.
¿Se está librando ya una Guerra Fría del siglo XXI? Está por ver. Aunque los historiadores afirman que las decisiones de Potsdam sentaron las bases de una larga rivalidad posterior a la Segunda Guerra Mundial, es posible que no reconozcamos el inicio de una nueva Guerra Fría hasta que sea visible en el espejo retrovisor de la historia.
Sí, Estados Unidos mandó tropas a Rusia
Durante la Guerra Fría, dos presidentes (Richard Nixon en 1972 y Ronald Reagan en 1984) declararon erróneamente que Estados Unidos y Rusia nunca lucharon entre sí. Sin embargo, lo hicieron, y una extraña guerra librada a -40 grados en la región subártica de Arkhangelsk entre septiembre de 1918 hasta junio de 1919, en la que fue una de las últimas escaramuzas de la Primera Guerra Mundial y que afectó a las relaciones entre ambos países durante décadas.
Tras la Revolución de Octubre de 1917, los bolcheviques de Vladimir Lenin llegaron al poder en Rusia, y el país se sumió en una guerra civil entre comunistas ("rojos") y nacionalistas ("blancos"). En medio de una crisis interna insostenible, en marzo de 1918 Lenin firmó un tratado de paz con Alemania y las Potencias Centrales (incluidos los imperios austrohúngaro y otomano) y sacó a Rusia de la Primera Guerra Mundial. Para los Aliados, la retirada de Moscú fue un golpe potencialmente fatal: las Potencias Centrales ya no tenían que preocuparse del frente ruso y podían converger sus esfuerzos en una ofensiva hacia París. Desesperados, en el verano de 1918, el Reino Unido, Francia y otros Aliados enviaron tropas al norte de Rusia y Siberia para influir en el resultado de la guerra civil rusa y recrear el Frente Oriental.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.