Así rescataron a una jirafa con un alambre metálico alrededor del cuello

Los trabajadores del Santuario de Mikembo, en la República Democrática del Congo, descubrieron que una de sus jirafas tenía alrededor del cuello un fragmento de alambre metálico.

De inmediato telefonearon al veterinario Neil Parsons y a su padre, Ian, en Zambia, que cuenta con años de experiencia trabajando con animales grandes. El 5 de enero, ambos acudieron a la RDC y trabajaron con los guardas del santuario para salvar al animal. Ian Parsons grabó el rescate mientras Neil ayudaba a la jirafa.

National Geographic ha hablado con Neil Parsons para preguntarle cómo consiguió tratar de forma segura al animal más alto del mundo.

¿Sabes cómo se quedó atrapada la jirafa?

Es muy extraño. Creemos que se quedó atrapada en una valla. O quizá fuera algún tipo de trampa. Pero no estamos del todo seguros. Como el alambre no estaba clavado en la piel, eso nos dio algo de tiempo.

¿Cuáles eran los peligros de dejar el alambre donde estaba?

Podrían haber pasado muchas cosas. Lo que más nos preocupaba era que el alambre se enganchara en un árbol y que la jirafa se ahorcase.

¿Es peligroso tranquilizar y capturar a una jirafa?

Para ellas, sí. Les inyectamos un fuerte opiáceo y, como corren, tienes que intentar ralentizarlas con las cuerdas, hacer que tropiecen. Generalmente caen bien. Si las haces caer demasiado rápido, puede ser bastante peligroso. La tasa de mortalidad puede ser alta.

Las jirafas pesan casi una tonelada y media, pero los trabajadores son buenos. Nunca hemos tenido heridas graves más allá de unos cuantos ojos morados.

Tuvimos la suerte de ver a la jirafa en una zona abierta donde fue fácil capturarla. Normalmente prefieren zonas de bosque, lo que dificulta nuestro trabajo.

¿Cuál fue la parte más difícil del rescate?

Mi padre y yo somos de Zambia, pero el equipo de rescate es del Congo. Todos hablan francés, pero nosotros no, y fue difícil comunicarnos. Las labores de rescate precisan de mucha comunicación, así que usamos lenguaje de signos y gestos. El equipo sabía lo que hacía.

En el vídeo le pones a la jirafa varias inyecciones. ¿Para qué son?

Lo primero que hice fue darle un antídoto para el opiáceo. Tuvimos que darle una dosis mortal de tranquilizante, ya que es la única forma de ralentizarlas lo suficiente. Así que le inyecté un medicamento para contrarrestar el opiáceo de inmediato.

Lo siguiente que le di fue una inyección de medicación antiparasitaria para tratar cualquier cosa que pudiera haberla infectado. Y después le di una inyección vitamínica para corregir cualquier deficiencia nutricional que pudiera haber afectado a su corazón. Las jirafas son propensas a sufrir afecciones cardíacas como miocardiopatía. 

¿Sabes qué le pasó a la jirafa después de que la liberáseis?

El equipo de Mikembo nos dijo que la jirafa parecía estar bien y gozaba de buena salud.