Descubiertas en ámbar garrapatas que se alimentaban de dinosaurios
Entre los fósiles diminutos conservados en resina del Cretácico se encuentra un parásito que estaba lleno de sangre cuando murió.
Descubrir parásitos llenos de sangre atrapados en ámbar es algo que ha avivado la creatividad de muchos desde la década de 1990, cuando los dinosaurios resucitados de Parque Jurásico salieron de la novela de Michael Crichton para aterrizar en la gran pantalla. Ahora, los científicos dicen haber encontrado algo así, pero de verdad: unos fragmentos de ámbar birmano contienen garrapatas que se alimentaron de la sangre de los dinosaurios hace 99 millones de años.
Uno de estos parásitos está enganchado a la posible pluma de un dinosaurio descubierta dentro del ámbar. Otro fue descubierto en un fragmento separado de ámbar de la misma región y se había hinchado hasta superar ocho veces su tamaño original, lo que sugiere que podría haber estado lleno de sangre cuando murió.