La mordedura de esta hormiga es el movimiento animal más rápido del planeta
La hormiga Drácula puede atacar a una velocidad 5.000 superior a la de un parpadeo, batiendo el récord de velocidad equivalente anterior por un factor de tres.
La hormiga Drácula se llama así por la forma en la que a veces se bebe la sangre de sus propias crías. Pero los insectos han saltado a la fama por otro motivo. Las hormigas Drácula de la especie Mystrium camillae pueden cerrar la mandíbula tan rápido que podrías encajar 5.000 golpes en el tiempo que tardamos en parpadear.
Esto significa que las chupasangres poseen el movimiento más rápido de la naturaleza, según un estudio publicado en la revista Royal Society Open Science.
Al parecer, estas hormigas producen sus ataques de récord cerrando las mandíbulas de manera tan fuerte que se doblan. Esto almacena energía en una de las mandíbulas, como un resorte, hasta que pasa frente a la otra y reparte golpes de una fuerza y velocidad extraordinarias, alcanzando una velocidad máxima de más de 320 kilómetros por hora.
Se parecería a lo que ocurre al chasquear los dedos, solo que mil veces más rápido.