Descubriendo la historia de América de la mano de las mejores visitas guiadas por nativos
Desde rastrear osos pardos en Alaska hasta explorar un antiguo cañón en Arizona, estas siete experiencias dirigidas por indígenas ofrecen una conexión más profunda con la tierra y sus historias.
Las visitas guiadas por nativos americanos ofrecen a los viajeros una forma inmersiva de explorar las culturas y los yacimientos indígenas de Estados Unidos, como el Panel de la Procesión, un petroglifo anasazi situado bajo la cima de Comb Ridge, en el sur de Utah.
A medida que aumenta el número de viajeros que dan prioridad a las experiencias locales y auténticas, en Estados Unidos están surgiendo cada vez más empresas turísticas de propiedad indígena para satisfacer esta demanda y compartir una cultura que ha sobrevivido a generaciones de genocidio y asimilación forzada.
Para los guías nativos, el turismo puede ser un medio de reivindicar narrativas que durante mucho tiempo han estado moldeadas por creencias externas y anticuadas sobre sus culturas.
Según los últimos datos de la Asociación de Turismo Indígena Americano y Nativo de Alaska (AINTA, por sus siglas en inglés), en los tres años comprendidos entre 2017 y 2020 se produjo un aumento del 230% en las empresas turísticas propiedad de indígenas americanos, nativos de Alaska y nativos de Hawái, y estiman que esas cifras van en aumento.
Para los viajeros que buscan explorar las culturas indígenas con experiencias que apoyen a las comunidades nativas americanas, te presentamos siete aventuras dirigidas por nativos en EE. UU. para agregar a tu lista de viajes pendientes.
Nathan James, guía de senderos navajo del rancho Totsonii, dirige una excursión a caballo por el Monumento Nacional Cañón de Chelly, en el este de Arizona.
Explora un extenso cañón en la Nación Navajo, Arizona
Canyon De Chelly se encuentra en el centro de la extensa reserva de la Nación Navajo. En Chinle (Arizona), este cañón de 33 500 hectáreas es uno de los paisajes habitados de forma continua desde hace más tiempo en el continente: los diné (comúnmente conocidos como navajos) ocupan la zona desde hace 5000 años. También es el lugar donde comenzó un momento crucial en la historia de la tribu. Conocida hoy como la Larga Marcha, entre 1863 y 1866, el ejército estadounidense, en su implacable campaña de expulsión de indios y expansión hacia el oeste, obligó a casi 10 000 diné a caminar más de 482 kilómetros desde Canyon de Chelly hasta Fort Sumner, en el actual Nuevo México. El Cañón de Chelly sigue siendo el hogar de un puñado de familias y los visitantes sólo pueden entrar acompañados de un guía diné.
Lupita McClanahan, de 69 años, anciana diné y propietaria y operadora de Footpath Adventures, creció en el vasto suelo del cañón, bajo sus imponentes paredes de arenisca. Durante la primavera y el otoño, McClanahan dirige grupos en una excursión de inmersión cultural de cuatro días por el cañón. En una inolvidable aventura con mochila, los visitantes recorren un antiguo sendero de arenisca, exploran petroglifos diné, viviendas en acantilados y cuevas, y participan en actividades culturales como moler maíz, hacer champú de yuca y reunirse para cantar y bailar canciones tradicionales, todo ello mientras McClanahan imparte historias generacionales diné.
Navegar en kayak por el puerto de Pavlof es otra forma de explorar la isla de Chichagof (Alaska), hogar de la población de osos pardos más densa del mundo.
En la isla de Chichagof, un oso pardo camina por el río Pavlof mientras pesca salmones cerca de Fresh Water Bay.
Rastrear osos pardos en la isla de Chichagof, Alaska
La isla Chichagof, del archipiélago Alexander de Alaska, alberga la población de osos pardos más densa de la Tierra y presenta un paisaje que encarna la majestuosa belleza natural de Alaska: espesos bosques de abetos, crestas alpinas, montañas nevadas, ríos boscosos y glaciares resplandecientes.
John y Marilyn Hillman, ambos tglingit, pusieron en marcha Wilderness Island Tours en 2021, después de que las compañías de cruceros instalaran muelles en su pequeña ciudad de Hoonah, lo que atrajo a la isla barcos repletos de turistas.
Wilderness Island Tours es el único operador turístico terrestre de propiedad indígena de la región. Sus excursiones llevan a los visitantes en coche a través del impresionante paisaje de la isla para ver su famosa población de osos pardos y aprender sobre los recursos naturales (salmón rojo rico en proteínas y ciervo de cola negra de Sitka, y hierbas y plantas medicinales, como el Oplopanax horridus o garrote del diablo y el s'ikshaldéen, y dulces como las bayas rojas brillantes nagoonberries) que han mantenido a sus habitantes nativos de Alaska durante miles de años.
Para los Hillman, que han pasado toda su vida en la isla, presenciar la emoción de alguien que ve un oso por primera vez es una de las mayores alegrías de compartir la belleza de su tierra natal.
"Lo mejor es que cuando nos cruzamos con un oso, la gente se emociona mucho", se ríe Marilyn. "Les cuento que hay que estar muy quietos y que tienen que aprender a susurrar, porque si no se vuelven al bosque. Entonces vemos al oso. Se olvidan de estar callados y gritan de emoción".
En Idaho, la tribu Nez Perce ofrece visitas guiadas para explorar los petroglifos de Nimiipuu y visitar las zonas históricas donde se originó el folclore de la tribu. Los visitantes también pueden ver demostraciones culturales y tipis, como los que se ven arriba, que se encuentran en la reserva.
Sumérgete en la cultura nimiipuu, Idaho
Elegida la mejor experiencia de patrimonio cultural por la AINTA en 2021, la tribu nez perce (que se autodenominan nimiipuu) ofrece a los visitantes de su reserva del norte de Idaho recorridos de inmersión cultural de varios días. La experiencia incluye la exploración de cientos de petroglifos nimiipuu a lo largo de las orillas del poderoso río Snake en el cañón Hells, una visita guiada al Parque Histórico Nacional Nez Perce, que cuenta con 38 zonas históricas y lugares donde se originaron piezas de la tradición nez perce, y demostraciones culturales de canto, danza, percusión y narración de cuentos.
La tribu ofrece experiencias de un solo día, como sesiones de equitación appaloosa, rafting en aguas bravas de clase III en el río Salmon y excursiones en lancha motora.
(Relacionado: Las promesas incumplidas de Estados Unidos con los pueblos nativos)
Admira mustangs salvajes en un santuario de 566 hectáreas, Wyoming
En la reserva de Wind River, en el centro de Wyoming, hogar de las tribus shoshone oriental y arapaho septentrional, la familia Oldham cuida de más de 250 caballos mustang salvajes en el santuario Wind River Wild Horse Sanctuary.
Los Oldham, contratados por la Oficina de Gestión de Tierras como pasto público (uno de los cuatro que hay en EE. UU. y el único en una reserva), reciben a los visitantes en el santuario de 566 hectáreas en visitas guiadas para ver de cerca a los caballos salvajes y aprender sobre su importancia para las distintas culturas nativas americanas, como la diné, la lakota, la shoshone y la arapaho.
Jess Oldham, de la etnia diné, afirma que la majestuosidad de los caballos salvajes deja a los visitantes asombrados. "Puedes sentir su fuerza. Cuando empiezan a correr, suenan como una tormenta. Te hace sentir el corazón", explica Oldham.
La empresa de excursiones Ancient Wayves River and Hiking Adventures, propiedad de los diné, puede organizar excursiones de un día o de varios que incluyen asombrosas vistas de las maravillas naturales de Utah, como el Valle de los Dioses, en el Monumento Nacional Bears Ears.
Recorre senderos para ver 100 000 yacimientos arqueológicos, Utah
Cuando Louis Williams, ciudadano diné y propietario de Ancient Wayves River and Hiking Adventures, lleva a los visitantes por el río San Juan, no tardan en desviarse a su arenosa orilla para poder echar un vistazo a los recuerdos de un mundo antiguo.
"Recorremos un kilómetro, incluso menos, y nos desviamos porque vamos a un panel de petroglifos, o quizá a un yacimiento donde cazaban los clovis [un antiguo pueblo que se remonta al 10 000 a.C.]", explica Williams. "Aquí hay mucha historia", asegura.
Situado en el sureste de Utah, en la Reserva de la Nación Navajo, cerca del Monumento Nacional Bears Ears, Ancient Wayves River and Hiking Adventures ofrece excursiones a pie de un día y de varios días, así como recorridos por el río guiados por ciudadanos de las tribus nativas americanas para las que es sagrado, como los diné, los zuni y los hopi.
El monumento nacional abarca más de 500 000 hectáreas en el condado de San Juan, Utah. Las vibrantes mesetas rojas de la zona, los profundos cañones, las mesetas, los picos y los valles encierran miles de años de historia y cultura para las tribus de la zona, muchas de las cuales siguen utilizando las tierras para ceremonias y prácticas culturales. Se calcula que hay 100 000 yacimientos arqueológicos en la zona, incluidos petroglifos y restos de antiguos pobladores (estructuras de viviendas, herramientas, cerámica, etc.) que ocuparon la zona ya en el año 11 000 a.C.
El Monumento Nacional Bears Ears alberga unos 100 000 yacimientos arqueológicos, entre ellos el Panel del Gran Hombre (petroglifos) que se encuentra en Grand Gulch, Utah.
Aprende a fabricar pipas de piedra tradicionales, Minnesota
Las tribus de las llanuras llevan miles de años extrayendo catlinita (un tipo de argilita) del Monumento Nacional de Pipestone para fabricar a mano pipas muy utilizadas en ceremonias tradicionales.
En el extremo suroeste de Minnesota, Keepers of the Sacred Tradition of Pipemakers, una organización de nativos americanos sin ánimo de lucro, mantiene vivo el arte y la tradición de fabricar pipas. Dirigidos por Bud Johnson, miembro inscrito de la Bad River Band of Lake Superior Chippewa Indians, los grupos ofrecen experiencias de varios días organizadas en torno a los fundamentos culturales de las 23 tribus afiliadas de la zona, que incluyen narraciones, danzas y ceremonias, una visita guiada al Monumento Nacional de Pipestone y una pernoctación en una vivienda tradicional primitiva.
A lo largo de la experiencia, expertos talladores de pipas guiarán a los participantes en el tallado de sus pipas de catlinita blanda de color rojo intenso extraída de una de las 56 canteras del monumento nacional.
(Relacionado: Sequoyah, el estado de indios nativos que casi existió en EE. UU.)
Embárcate en una aventura para explorar la cultura Wabanaki, Maine
Dirigido por Mahoosuc Guide Service en colaboración con guías de la nación penobscot, The Way of the Wabanaki lleva a los visitantes en una aventura de cuatro días por las culturas de los primeros pueblos de Maine.
El viaje comienza con un descenso de 11 kilómetros en canoa por el río Penobscot hasta Sugar Island, donde se encuentra un campamento cultural wabanaki con ceremonias, reuniones, cabañas de sudor, senderos y powwow. Durante los dos días siguientes, miembros de la tribu penobscot, guardianes culturales y guías enseñan a los grupos a tejer cestas, construir canoas de corteza de abedul, identificar plantas medicinales, tallar sílex, construir refugios y explorar los senderos de la isla.
Elyse Wild es una periodista galardonada que cubre las comunidades nativas americanas, editora de Vulgar Advice y cocreadora del podcast Missed Connections.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.